El consumo de gas cayó un 8% en 2013, hasta los los 335.989 GWh

La causa de este descenso provino, principalmente, de la caída en el consumo de gas natural para la generación de electricidad, superior al 33%, tal y como reflejan las estadísticas de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores).

En concreto, en el ejercicio 2013 se demandaron 56.140 GWh para generación eléctrica, lo que supone un 33,7% menos que entre enero y diciembre de 2012, cuando se llegó a los 84.722 GWh.

Por el contrario, la demanda convencional de gas natural en el mercado nacional, que incluye el consumo doméstico, comercial e industrial, aumentó un 0,8% el pasado año, al alcanzar los 279.849 GWh, frente a los 277.629 GWh de 2012.

En el mes de diciembre, el consumo de gas natural en España aumentó un 2,4%, al demandarse un total de 35.534 GWh, de los que 6.154 GWh fueron para generación eléctrica y 29.379 GWh para convencional.

El FADE coloca bonos por 1.500 millones de euros a un interés del 1,946%, el más bajo de su historia

La emisión de este martes, en la que actuaron como entidades colocadoras BBVA, Credit Agricole, Caixabank y Deutsche Bank, tiene vencimiento en enero de 2018, según la información del mercado.

La última emisión del FADE, realizada el pasado 29 de octubre, ascendió también a 1.500 millones de euros, con un vencimiento a tres años, y logró un bajo tipo de interés (el del Tesoro mas 20 puntos básicos).

El fondo es un mecanismo creado en 2010 para colocar con el aval del Estado en el mercado (titulizar) la deuda que asumen las compañías eléctricas como resultado del déficit de tarifa, y con el objetivo de aliviar el lastre que suponía para el balance de las eléctricas mantener este volumen de derechos de cobro en sus cuentas.

Con esta emisión, la primera de 2014, el FADE retoma las emisiones en un ejercicio en el que centrará sus esfuerzos en la refinanciación de la deuda del sistema eléctrico ya emitida.

Las fuentes señalaron que estas refinanciaciones permiten así rebajar los tipos de interés con los que se colocaron las primeras emisiones del FADE, especialmente altos en 2011, cuando el país sufría las consecuencias de la crisis de la deuda soberana.

De hecho, el «spread» actual para este tipo de colocaciones ronda los 18 puntos básicos respecto a las emisiones del Tesoro, lo que permitiría refinanciar la deuda a precios muy inferiores a los del 5,56% registrados de media en 2011 y 2012.

Según el último informe de saldo vivo de la deuda eléctrica, elaborado a finales del año pasado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el déficit de tarifa acumulado asciende a 25.456 millones de euros, a los que hay que sumar los 3.600 millones de euros que se generen en 2013. De este importe, el 88,51% corresponde a emisiones realizadas por el FADE.

En 2011 y 2012, el fondo colocó entre emisiones privadas y sindicadas un total de 15.471 millones de euros del déficit de tarifa, mientras que en 2013 realizó 16 emisiones para colocar otros 9.722 millones de euros.

Ante la envergadura de las refinanciaciones de la deuda eléctrica previstas para 2014, la propia CNMC aclaró que estas operaciones «no incrementarán la deuda del sistema eléctrico», sino que consisten sólo en un ajuste de la anualidad para recoger los cambios en las condiciones de financiación.

Luis de Guindos garantiza que el nuevo sistema para la fijación de precios de la electricidad será más «eficiente, asequible y competitivo»

Durante su intervención en los Desayunos Informativos de Europa Press, el ministro explicó que Industria anunció este lunes el nuevo sistema que se centrará en el «mercado spot» y no en el mercado a futuro como se hacía antes.

Tal y como indicó, este mercado arrojó en los últimos tiempos un comportamiento medio inferior en un 3% al que supuso el mercado de futuros, por lo que es «lógico» que el precio de la electricidad baje con el nuevo sistema.

Además, el titular de Economía y Competitividad recordó que las empresas podrán ofrecer a los ciudadanos una tarifa plana que garantice un precio de la electricidad fijo para periodos de más de seis meses, que hará más estable la factura.

Por todo esto, garantizó que el nuevo sistema, con el que se elimina la subasta Cesur, será «más eficiente» e introducirá «más competitividad y más mercado», además de tener tarifas más «adecuadas y asequibles» para el consumidor final.

La demanda de gas baja un 10,8% en enero por el escaso uso eléctrico

Según datos provisionales del operador del sistema consultados, la demanda convencional de gas -la de hogares y empresas- cayó en enero un 6%, aunque este descenso se redujo al 0,5% si se corrigen los efectos de la laboralidad y la temperatura.

Mientras tanto, el consumo de gas para generación de electricidad se desplomó un 35,5%, tras ceder un 32,8% en el conjunto del ejercicio 2013.

El pasado mes, las centrales de ciclo combinado españolas funcionaron a una media del 10% de su capacidad.

En los últimos doce meses, el 51% del gas transportado en España procedía de Argelia; el 12%, de Francia; el 11%, de Catar, y el 10%, de Nigeria.

José Manuel Soria afirma que el nuevo sistema para fijar el precio de la luz evitará los «costes extra»

En declaraciones a los periodistas tras un acto informativo en La Palma, recordó que el anterior modelo, vigente desde 2009, comportaba un gasto adicional en la factura de 270 millones de euros que debían pagar «todos los españoles en el recibo», al margen de que en la última subasta, por ejemplo, concurrieron «circunstancias atípicas», según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

«Ahora vamos a pagar exactamente lo que hayamos consumido y se acerca mucho a un precio de mercado, se evita el coste extra y va en la línea de disminución de costes del Gobierno», comentó.

De hecho, resaltó que entre 2004 y 2011, con el PSOE en el Gobierno, los precios de la luz subieron un 63,2%, mientras que el año pasado, por ejemplo, bajó un 3,7% según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

IU pide que la luz no suba por encima de la inflación

Por su parte, el coordinador federal de IU, Cayo Lara, aseguró que a su federación «le da igual» qué sistema se elija para fijar el precio de la luz y defendió que éste no puede subir por encima de la inflación.

Así lo dijo al ser preguntado por el anuncio del secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, de que a partir de abril no habrá subasta eléctrica y que para fijar el precio el Gobierno utilizará la media de los precios de los mayoristas.

«A nosotros el sistema nos da igual. Lo que no puede ser es que el precio de la luz suba por encima de la inflación y esté empobreciendo cada vez más a los ciudadanos de este país», dijo Lara, quien denunció que mucha gente en España dejó de encender la luz de su casa «porque no puede pagar el recibo y antes tiene que comer».

Asimismo, recordó que el Congreso de los Diputados tumbó una iniciativa sobre pobreza energética para proteger a quienes no puede pagar la luz, que es un servicio básico, por falta de recursos económicos.

Además, manifestó que es difícil entender que se defienda que hay un déficit tarifario que obliga a subir el precio de la luz «una vez sí y otra también», mientras las empresas eléctricas continúan obteniendo beneficios.

Anae ve «excelente» eliminar las subastas Cesur

La Asociación Nacional de Ahorro y Eficiencia Energética (Anae) calificó de «excelente noticia» la eliminación de las subastas entre comercializadoras de último recurso de electricidad (Cesur), ya que «de media el mercado mayorista de la electricidad (OMIE) es bastante más barato» que los precios resultantes de estas pujas.

De hecho, la asociación calculó que la diferencia media entre estas subastas y el precio final del mercado asciende al 17,5%. En 2011 se pagó un 6,8% más alta la energía, mientras que en 2009 la diferencia llegó a ser del 24,2%, y en el mes de enero se situó en el 44,2%.

Anae consideró que la Cesur era un «producto financiero» en el que «intervenían multitud de agentes ajenos al negocio físico de la electricidad», cuyo coste se repercutía sobre los 26 millones de usuarios con tarifas reguladas.

«Su resultado trataba de garantizar margen de beneficio a todos estos intermediarios, consiguiéndolo, a veces de manera muy importante, en la inmensa mayoría de los trimestres», recordó.

Frente a este mecanismo, el mercado mayorista de electricidad funciona como plataforma «donde los participantes sí forman parte del negocio físico de la electricidad y en donde multitud de consumidores, en su inmensa mayoría de índole profesional, compran su energía en productos parecidos a los que ahora parece comprará el doméstico y por mediación de la comercializadora correspondiente o directamente».

Anae también defendió el efecto abaratador del «pool» ejercido por las renovables y advirtió de que «no es oro todo lo que reluce» y de que el mercado el mercado mayorista «también tiene sus peros».

Los consumidores ven «insuficiente» la supresión de la Cesur

Asimismo, el portavoz de Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, aseguró que la propuesta de Industria de suprimir la subasta Cesur es «claramente insuficiente», ya que «no va a resolver la problemática de las altísimas tarifas».

Sánchez consideró que «si ha podido haber juego sucio en la subasta, no tenemos por qué pensar que no lo haya en el mercado mayorista», ya que el sector eléctrico «goza de nuestra absoluta desconfianza».

Las reservas de esta asociación de consumidores pasan por que, entre otros factores, «es el tercer sector con más denuncias por fraude» e «históricamente han hinchado los precios». Además, consideró «sospechoso» que el Ejecutivo no acceda a dialogar con las asociaciones de consumidores.

Para Facua, «el Gobierno se recortó capacidad de control», ya que consideró que la absorción de la antigua Comisión Nacional de Energía (CNE) por la actual Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha traído consigo que «los que antes trabajaban en una cosa, ahora trabajen en muchas» y «no den a basto».

Por su parte, para la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) la propuesta de anular en abril la subasta trimestral «soluciona sólo una parte del problema», «la especulación» en el precio de la subasta CESUR y evita el sobreprecio que pudiera producirse, pero estimó que no soluciona el sistema de fijación del precio mayorista en base al mercado mayorista, porque «no es transparente» y hace que prevalezca «el precio de la más cara y no el coste real» de producir la energía.

«El sistema de precios marginales hace que todas las tecnologías reciban el precio de la más cara y no el coste que realmente cuesta producir la energía», aseguraron desde la OCU.

Es por ello que consideraron «fundamental» reformar la fijación del precio mayorista de la energía, «más ahora que ese precio servirá para determinar lo que pagarán los consumidores». Asimismo, ambas organizaciones coincidieron en que lo positivo de esta propuesta es que se reducirá la «especulación» que caracteriza a la subasta trimestral Cesur.

Además, según añadió la OCU, otra novedad importante fue el anuncio de que los comercializadores de último recurso, deberán ofrecer a los consumidores que lo soliciten una tarifa fija que no cambiará durante el año, aunque advierte de que «puede ser mayor que el precio fijado de forma trimestral».

Además, advirtió de la futura subida de los peajes del gas que hará que se incremente de nuevo su factura puesto que, según explicó, la CNMC preparó una propuesta de cálculo de peajes y cánones de acceso al gas y que, de aprobarse esta metodología, supondrá una subida media del 5,4% en la parte regulada del recibo.

Esto para los consumidores supondrá una subida de 2,4% en su factura, lo que pude suponer un aumento de 20 euros de media anuales, un alza al que habrá que añadir, según la OCU, el coste de la materia prima.

Los consumidores consideraron que la excusa para la revisión del método de cálculo es la eliminación del déficit tarifario que también existe en el mercado del gas, que fue de 166 millones de euros en 2013, y que según la propia CNMC en 2014 podría alcanzar los 813 millones de euros.

Esta nueva subida «será un nuevo golpe para los consumidores y agudizará los problemas que muchas familias tienen para pagar sus facturas de calefacción», concluyó la OCU.

Finalmente, la Asociación General de Consumidores (Asgeco) mostró sus dudas sobre «la verdadera utilidad» de los nuevos contadores eléctricos, a los que consideró «inteligentes» pero «ciertamente inútiles» para los consumidores.

La asociación lamentó que las últimas actuaciones del Gobierno y de las eléctricas vayan en el sentido contrario de que estos contadores ofrezcan «una información precisa, desglosada e inteligible para los consumidores», alejándose cada día más de un modelo de ahorro y eficiencia y volviéndose «sencillamente inútil» su instalación.

Así, Asgeco consideró «indispensable» que estos nuevos contadores inteligentes ayuden a los usuarios a controlar mejor su consumo y a abaratar su factura eléctrica, y no sólo que sirvan a las compañías eléctricas para mejorar su propia gestión.

El Gobierno propone que las grandes eléctricas paguen este año el 99,3% del coste del bono social

El borrador fija el porcentaje que tendrá que abonar cada una de las veintisiete eléctricas integradas contempladas por el Gobierno en concepto de bono social.

Las mayores aportaciones corresponden a las cinco grandes eléctricas: Endesa (41,62%), Iberdrola (38,47%), Gas Natural Fenosa (14,19%), Hidroeléctrica del Cantábrico (2,65%) y E.ON España (2,37%).

La reforma energética aprobada el pasado año determinó que las eléctricas integradas -es decir, aquellas que aglutinan actividades de producción, distribución y comercialización- asumieran el coste del bono social.

Actualmente, el bono social lo pagan el resto de consumidores a través de la factura, después de que los tribunales rechazaran el modelo que obligaba a las cinco grandes a cargar con este coste, que en 2013 ascendió a 228,4 millones de euros.

De acuerdo a la memoria que acompaña a la propuesta de orden, «la traslación del coste del bono social al conjunto de los consumidores se revela como especialmente inadecuada en el presente momento», por lo que se decidió trasladarlo a las empresas.

Así, reconoció que la medida «tiene impacto» en los grupos «verticalmente integrados, si bien la imposición de esta obligación (…) permite, siquiera sea indirectamente, repartir dicha carga entre las principales actividades empresariales intervinientes en el sector eléctrico».

El borrador de orden fue remitido por la vía de urgencia a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que dispondrá de cinco días para presentar alegaciones.

Equo denuncia que la nueva tarifa de la luz penaliza las rentas más bajas

Esta formación política señaló, además, que la subida del término fijo de la factura eléctrica desincentiva las medidas de ahorro y eficiencia energética, al mismo tiempo que aumenta la pobreza energética.

El pasado 1 de febrero el Ministerio de Industria cambió la estructura de la factura eléctrica, aumentando el peso de la parte fija hasta suponer el 60% de la factura, explicó Equo.

«Esta medida ha supuesto un encarecimiento de la luz para los pequeños consumidores, que verán incrementada una vez más su factura eléctrica, mientras que se reduce la de los grandes consumidores», denunció.

Para Equo, esta medida «lejos de ser una transferencia de rentas hacia las familias, tal y como defiende el Ministerio, supone una transferencia neta de dinero desde las rentas más bajas a las más altas, aumentando la brecha energética de nuestra sociedad».

Con esta decisión, el Gobierno «pretende engañar a la ciudadanía, con una subida de la factura que se va a sumar a la ya acumulada del 75%en los últimos diez años».

Eguo reclamó la adopción urgente de acciones de fomento del ahorro y eficiencia energética, así como la transposición de las directivas europeas que en materia de energía están todavía pendientes.

Por último, destacó la creciente pobreza energética, «que este invierno está provocando que cada vez más hogares tengan problemas para pagar su factura energética» y exigió al Gobierno que tome medidas para paliar esta situación y que apueste por un nuevo modelo energético más justo y sostenible.

El PSOE afirma que la «injusta» subida de la parte fija de la luz agrava la pobreza energética

Durante una rueda de prensa en la sede socialista de la calle Ferraz, López subrayó que el Gobierno duplicó el término fijo del recibo, «lo que todo el mundo paga aunque no consuma», de forma que el nuevo escenario «penaliza a los que menos recursos tienen».

«Estamos creando una situación de pobreza energética» ante medidas como esta, que es «injusta y brutal para quienes menos tienen y consumen poco», afirmó el secretario de Organización del PSOE.

En su opinión, la política energética del Gobierno es «claramente errática», salvo que consista en «acabar» con las renovables y potenciar la nuclear, el fracking y las plataformas petrolíferas.

«Acabamos de conocer una decisión desastrosa para las renovables del país», cuando al mismo tiempo se «apuesta por alargar la vida de las nucleares» y por el fracking, añadió.

Pide la marcha atrás en el recorte a la cogeneración con purines

Por otra parte, el portavoz de Agricultura del PSOE en el Congreso de los Diputados, Alejandro Alonso, exigió al Gobierno que dé marcha atrás en el recorte «drástico» de las retribuciones a las plantas de cogeneración por el tratamiento de purines (residuos de origen orgánico), prevista en la Ley del Sector Eléctrico, y advirtió de que seguir adelante con esta medida conllevará el cierre de hasta una treintena de plantas en toda España.

El diputado toledano acusó al Gobierno de «incompetencia» en esta materia y recordó que la cogeneración a partir de residuos vegetales y animales es «un sector clave de la agricultura española» que en los últimos años ha alcanzado una cifra de negocio de 19.000 millones de euros por esta producción en la que también se emplea a «cientos de miles» de personas.

«Los daños ambientales y económicos por el cierre de explotaciones porcinas puede ser irreparable», aseguró Alonso, apuntando que las fábricas en riesgo son once de Castilla y León, seis de Cataluña, cuatro de Aragón, tres de Murcia, dos de Castilla-La Mancha y una, respectivamente, en Galicia, Andalucía y Navarra.

Además, el portavoz socialista vio «inexplicable» que el Ejecutivo haya tomado esta decisión de recortar las primas «sin negociación ni análisis de impacto» y «triturando» un acuerdo suscrito por el Gobierno socialista y el sector en 2007 para «garantizar la supervivencia de todas estas instalaciones por un mínimo de quince años».

«El problema no es energético, sino que el PP genera un gravísimo problema medioambiental porque el valor ambiental de estas plantas es impresionante ya que dan una salida correcta a millones de toneladas de purines que no encontrarían otro destino si las plantas se cierran, abocando a su desaparición a miles de explotaciones porcinas», aseguró Alejandro Alonso.

Por ello, insistió en reclamar al Gobierno que «mantenga unas medidas tarifarias que den continuidad a un sector vital para el mantenimiento de las explotaciones porcinas y para dar salida correcta a los purines que producen».

Alonso, junto con los portavoces parlamentarios de Economía e Industria, Valeriano Gómez y José Segura, respectivamente, se reunió con la Asociación de Empresas para el Desimpacto Ambiental de los Purines (ADAP) y con la Unión de Agricultores y Ganaderos.

El kilovatio es un 48% más caro en España que en el país europeo más barato, según un estudio de Facua

En el informe, realizado entre septiembre de 2013 y enero de 2014, Facua analiza la situación del suministro eléctrico en diez países, de los que dos, Albania y Serbia, no están en la Unión Europea, y otros ocho sí lo están. Estos ocho países son Chipre, España, Estonia, Francia, Grecia, Hungría, Italia y Portugal.

Esta iniciativa, señaló la asociación, es la primera de carácter conjunto propuesta por Facua a nivel europeo, y con ella se intenta «arrojar luz sobre un sector tan importante como desconocido para muchos de los consumidores del continente».

Entre otros aspectos, el estudio establece una comparativa de tarifas según el precio regulado del kilovatio por hora (kWh) consumido.

En las conclusiones se aprecia que el precio del kilovatio hora regulado asciende en España a 0,124985 euros, sin impuestos incluidos, resulta un 48,2% más caro que la tarifa más barata de la región, encontrada en Hungría y consistente en 0,06475 euros.

Otra de las tarifas reguladas más económicas es la de Albania, con un precio medio de 0,075398 euros por kWh, mientras que sólo Portugal, con 0,1405 euros, y Chipre, con 0,225 euros, disponen del kilovatio hora regulado más caro que en España.

Además, seis de los diez países participantes en este estudio aportaron datos comparativos sobre las ofertas existentes en el mercado libre de suministro eléctrico.

El precio medio del kWh en el mercado libre de España asciende a 0,139141 euros, un 68,3% más que en Estonia, el país con el precio medio del kilovatio hora libre más económico de los países comparados, con 0,044117 euros.

España es, además, el país con el precio medio del kilovatio hora en el mercado libre más caro de los analizados. A España le sigue de cerca Portugal, con 0,137383 euros de media.

En estos dos países a pesar de que los consumidores pueden optar de forma generalizada por la tarifa regulada por sus gobiernos o por el mercado libre, las tarifas medias para esta última opción resultan más caras que las protegidas.

Además de Estonia, entre los países con el precio medio del kilovatio hora más barato de los analizados están Francia, con 0,086533 euros, y Grecia, con 0,088 euros.

El déficit de tarifa alcanzará los 1.100 millones de euros en 2014 pese al recorte a las renovables, según un informe de Macquarie

«Este recorte nos permite reducir nuestra estimación anterior de déficit de tarifa para 2014 en 150 millones de euros al año, lo que da como resultado una nueva estimación de 1.100 millones de euros», señaló la firma, antes de concluir que el desequilibrio en el sistema eléctrico «todavía no está resuelto».

Macquarie parte de un déficit de tarifa estructural de 5.500 millones de euros, que se verá compensado por los impuestos a la producción eléctrica (2.500 millones de euros) y los recortes a renovables (1.750 millones de euros), interrumpibilidad (200 millones de euros), pagos por capacidad (196 millones de euros) y transporte y distribución (214 millones de euros).

No obstante, también se prevé un incumplimiento por el Gobierno de transferencias de partidas procedentes de las cuentas públicas por valor de 900 millones de euros. Esta partida corresponde con los extracostes de la actividad extrapeninsular.

La firma calculó que Iberdrola sufrirá un recorte del 25% en sus ingresos procedentes de las renovables, frente al 23% de Acciona y el 10% de EDP Renováveis. El impacto para Iberdrola será de 248 millones de euros, para Acciona de 175 millones de euros y para EDP de 42 millones de euros.

En otro informe, Mirabaud analizó la situación de Acciona y cifró en 188 millones de euros el impacto del recorte, de los que 170 millones de euros proceden de la actividad eólica. No obstante, la compañía presidida por José Manuel Entrecanales «sigue siendo solvente». Es previsible que haya una «renegociación de la financiación» de los proyectos, pero no se esperan quiebras, ya que «la práctica totalidad de los parques de Acciona podría devolver su deuda en un plazo inferior a 20 años».

Los analistas de Cheuvreux consideraron por su parte que el panorama para las renovables es «peor de lo esperado» y que, sólo para la eólica, el recorte alcanzará los 955 millones de euros.