El gas natural y la bombona de butano suben un 5,7 % desde julio

En el caso del gas natural, la subida supondrá un incremento del 5,69%, que se traducirá en un aumento de 2,37 euros al mes para un usuario medio, o de 28,4 euros más al año, y será superior para los hogares en los que el gas se utilice para calefacción, además de para cocina y el calentamiento de agua.

La Tarifa de Último Recurso 1 (TUR 1) registrará un incremento del 4,61%, lo que supone una subida de 0,68 euros al mes para el consumidor medio. Esta tarifa corresponde a consumos de menos de 5.000 kilovatios hora (kWh), propios de viviendas en las que el gas se utiliza para cocina y agua caliente.

En el caso de la TUR 2, de más de 5.000 kWh al año y habitual en hogares de gas para calefacción, la subida será superior, del 5,95%, o de una media de 2,78 euros al mes.

La subida de julio del gas natural se suma a la del 4,1% aplicada en abril (lo que representó un incremento medio mensual de 1,44 euros), mientras que en enero, las tarifas reguladas del gas subieron un 3,9 % de media, situando en el 9,5% el encarecimiento de este producto en lo que va de año.

Al igual que en la electricidad, la estructura de precios del gas está determinada por el valor de los peajes de acceso destinados a financiar las infraestructuras y por el coste de la energía, que se determina mediante una fórmula que emplea los precios obtenidos en las subastas de gas y las cotizaciones internacionales del crudo Brent y de los mercados de futuros del gas.

En la revisión de julio, la subida se debe al encarecimiento de la materia prima. Industria mantuvo los peajes del gas, que recogen los costes regulados, pero el precio del gas subió un 13,65%.

En la actualidad, hay unos 7,3 millones de clientes susceptibles de acogerse a la TUR de gas, de los que 3 millones ya lo hacen –1,8 millones están en la TUR 1 y 1,2 millones en la TUR 2–, mientras que 4,3 millones tienen un contrato en el mercado libre. No obstante, los precios de la subasta de gas marcan también las ofertas que se hacen en el mercado libre.

Paralelamente, el precio después de impuestos de la bombona media de butano, de 12,5 kilogramos, se situará en julio en 14,8 euros, lo que supone un incremento del 5,7%, o de 80 céntimos, con respecto a los 14 euros del trimestre anterior.

Con esta subida, la bombona acumula un encarecimiento del 12,2% con respecto a enero, después de haber registrado un incremento del 6% en la anterior revisión trimestral.

En su resolución de revisión de precios, Industria indicó que el precio máximo de venta antes de impuestos de los gases licuados del petróleo envasados en recipientes de entre 8 y 20 kilogramos se situará en 100,365 céntimos por kilogramo.

La subida del butano, que en el conjunto de 2010 fue del 16,6%, afectará a los entre 8 y 10 millones de usuarios que hay en España de este producto, cuyo precio revisa trimestralmente el ministerio de Industria mediante una fórmula que recoge las cotizaciones internacionales del propano y del butano.

Los butaneros consideran insuficiente la subida del butano

Por su parte, la subida del 5,7% en el precio del butano sigue siendo insuficiente para la Asociación de Operadores de Gases Licuados del Petróleo (AOGLP) porque «aun siendo considerable, mantiene el precio final de esta materia prima por debajo de los costes reales y prolonga la situación de venta a pérdidas que viene sufriendo el sector desde hace 19 años».

Según señaló esta organización, la fórmula actual de fijación de precios ya generó un déficit de tarifa acumulado cercano a los 550 millones de euros.

Solamente durante los primeros cinco meses del 2011, los operadores registraron pérdidas superiores a los 68 millones de euros, cifra que según previsiones crecerá a un ritmo medio diario de 500.000 euros y que se incrementará a medida que sube el precio de las materias primas. Actualmente, por cada bombona de butano que vende en España un operador de gas licuado pierde cerca de tres euros.

La regulación del precio del GLP envasado «coloca a las empresas que operan en España en una situación de precariedad económica en relación a los países de su entorno». En Portugal, la botella de butano es un 60% más cara que en España (21 euros frente a los 14 euros de España) mientras en Francia el coste de la bombona se duplica con relación al español, añadió la AOGLP. De hecho, «cada vez son más frecuentes las compras de butano español por parte de consumidores portugueses y franceses que cruzan ex profeso la frontera», añadió.

Esta organización interpuso un recurso ante el Tribunal Supremo contra la reglamentación gubernamental que determina el precio del butano, así como una denuncia ante la Unión Europea contra el Reino de España por incumplimiento de las normas en materia de libertad de establecimiento (artículo 49 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, «TFUE»).

Según señaló José Luis Blanco, director general de AOGLP, la asociación continúa atenta a las posibles valoraciones que sobre el tema realicen tanto el Tribunal Supremo como la Unión Europea». Mientras tanto «se mantiene la voluntad de colaborar con las distintas instituciones en la búsqueda de soluciones y consenso para llegar a acuerdos en pro de los consumidores y que protejan los intereses de todos los actores del sector».

También recordó que «este sector es fundamental para la sociedad española, ya que suministra energía a más de ocho millones de hogares y mantiene cerca de nueve mil empleos directos e indirectos».

Asimismo, la Unión de Consumidores de España (UCE) manifestó su más absoluto rechazo a la decisión del Ejecutivo de incrementar los precios del gas y el butano, cuya repercusión sobre las economías domésticas va a ser «catastrófica».

«El aumento en el precio del gas, y del butano nos parece absolutamente fuera de lugar«, más aún cuando la subida representa casi el doble de la inflación.

Del mismo modo, quiso puntualizar que los usuarios de butano suelen ser, en su mayoría, familias de bajo poder adquisitivo o personas mayores con pocos ingresos, «por lo que este incremento se ceba, una vez más, con los ciudadanos más afectados por la crisis».

Los carburantes caen antes de las vacaciones y el fin de los 110 km/h

De acuerdo con los datos publicados por el Boletín Petrolero de la Unión Europea, el pasado lunes 27 el litro de gasolina de 95 octanos se vendía de media en España a 1,305 euros y el de gasóleo de automoción, a 1,243 euros.

Con estos precios medios arrancará el viernes, 1 de julio, la primera operación salida del verano, que coincide además con la vuelta a los 120 kilómetros por hora de límite, que el Gobierno aprobó el pasado viernes tras cuatro meses de rebaja para ahorrar petróleo.

Desde el máximo alcanzado a principios de mayo por la gasolina eurosúper, el precio medio del litro acumula un descenso del 5,5%.

Con los precios actuales, llenar un depósito de 50 litros de gasolina cuesta 2 euros menos que hace un mes y 1,15 euros menos en el caso de gasóleo.

No obstante, pese a los descensos de esta semana, desde que empezó 2011 el precio de la gasolina acumula una subida del 3,82% y el gasóleo, del 4,72%.

Y comparados con los precios de junio del año pasado, ese depósito de 50 litros cuesta unos 7 euros más en ambos casos.

El barril de Brent, petróleo de referencia en Europa, cotizó en el entorno de los 108 dólares en la última semana, tras anunciar la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que va a poner en el mercado 60 millones de barriles de petróleo de sus reservas estratégicas para paliar la falta del crudo de Libia debido a la guerra civil en ese país.

Aunque influye, el precio de estos combustibles no tiene relación directa con la cotización del barril del petróleo, sino que dependen, en gran medida, de los precios de la gasolina y del gasóleo en los mercados al por mayor del mar Mediterráneo y del noreste de Europa y de los impuestos, que suponen casi el 50% de su precio final.

Con respecto a Europa, los carburantes en España son de media más baratos que en la UE-27 y la zona del euro. Así, la gasolina sin plomo de 95 octanos cuesta en la UE-27 una media de 1,472 euros por litro y en la UE-17 se paga a 1,487 euros el litro, en tanto que el precio del gasóleo de automoción es de 1,342 euros y de 1,324 euros, respectivamente.

Los precios de la electricidad y del gas para los hogares en España son más caros que el promedio europeo

En España, el precio medio de la electricidad para uso doméstico por 100 kilovatios hora se sitúa en 18,51 euros y sube hasta 20,04 euros si se tiene en cuenta el poder de compra, por encima de la media de la Unión Europea (17,08 euros).

Además, entre el segundo semestre de 2009 y el segundo semestre de 2010 las tarifas subieron un 9,9%, frente al 5,1% en la Unión Europea. Este incremento se suma al alza del 8,2% entre el segundo semestre de 2008 y el segundo semestre de 2009, frente a una caída del 2,3% en la Unión Europea.

Según datos de Eurostat, en el citado periodo los mayores encarecimientos de la electricidad se dieron en Lituania (+31,3%), Chipre (+23,1%), Grecia (+17,3%), Noruega (+14%) y Malta (+12,4%), mientras que los mayores descensos fueron los de Holanda (-7,9%), Luxemburgo (-7%) e Italia y la República Checa (-4% en los dos casos).

Respecto a los países donde la electricidad para los hogares es más cara son Dinamarca (27,1 euros por 100 kWH), Alemania (24,4), Chipre (20,2) y Bélgica (19,7), mientras que en el extremo contrario se sitúan Bulgaria (8,3), Estonia (10), Letonia y Rumanía (10,5 cada uno).

En España, el precio de la luz subió un 9,9%, es decir, 4,8 puntos porcentuales por encima de la media y en niveles similares a los de Estonia (+9,1%) y Rumanía (+8,1%).

Por lo que se refiere al gas, en España el precio medio por gigajulio se sitúa en 15 euros, pero si se tiene en cuenta el poder adquisitivo el precio real asciende a 16,24 euros, por encima de 15,88 de promedio en la Unión Europea.

No obstante, las tarifas de gas para los hogares españoles subieron sólo un 0,8% entre el segundo semestre de 2009 y el segundo semestre de 2010, frente al 7,7% en el conjunto de la Unión Europea. Asimismo, cayeron un 18% entre el segundo semestre de 2008 y el segundo semestre de 2009 (más que la media comunitaria del 15,5%).

En cuanto a los países en los que más subió el recibo del gas que pagan los consumidores domésticos son Italia (+47%), Eslovenia (+25%) y Bulgaria (+24%). Las principales bajadas de precio fueron registradas en Eslovaquia y Reino Unido (-6% en ambos países) e Irlanda (-4%).

Por su parte, los Estados miembros con tarifas de gas más caras para los hogares son Suecia (30,3 euros por gigajulio), Dinamarca (30,1), Italia (21,9) y Países Bajos (19,8), mientras que los países más baratos son Rumanía (7,7), Estonia (11,1), Letonia (11,3) y Reino Unido (11,7).

El precio del GLP por canalización desciende un 6%, según el BOE

El precio máximo del término variable de la tarifa para usuarios finales de GLP por canalización antes de impuestos se sitúa en 98,6258 céntimos de euro por kilogramo, frente al precio de 105,5 céntimos de euro por kilogramo que marcó en mayo.

De esta forma, el GLP por canalización invierte la tendencia de subidas de precio que venía registrando mensualmente (un máximo del 3,7% el pasado mes de abril) desde el pasado mes de marzo, dado que en febrero también se anotó un descenso, en ese caso del 9%.

Con todo, el precio de este producto es un 7,3% inferior respecto al de 106,42 céntimos de comienzos de año. En el conjunto de 2010, registró una subida del 26%.

Además, según el Boletín Oficial del Estado (BOE), el término fijo de este combustible mantiene su precio en 1,51 euros al mes.

De su lado, el precio del GLP canalizado para su distribución a granel baja también este mes, concretamente un 7,50%, hasta 80,6396 céntimos por kilogramo.

La revisión de precios de los gases licuados por canalización se realiza mediante una fórmula automática que pondera el precio de la materia prima, el flete y la cotización entre el euro y el dólar.

El precio del GLP canalizado sube casi un 30% en tan sólo un año

Así consta en el «Informe de Supervisión del Mercado Minorista de GLP Canalizado en España. Año 2010«, publicado por el Comisión Nacional de la Energía (CNE), un documento que analiza la evolución del mercado de Gas Licuado del Petróleo (GLP) canalizado, es decir, del butano, en el año 2010.

El ejercicio se cerró con una demanda de GLP canalizado de 311.880 toneladas (equivalentes a 4.337 gigavatios por hora -GWh-), con lo que fue un 8,46% mayor que la de 2009 (287.554 toneladas).

El 63,6% de la demanda total de GLP canalizado en el año 2010 se concentró en cinco comunidades autónomas: Madrid (21,4%), Cataluña (12%), Galicia (10,5%), Castilla y León (10,3%) y Castilla-La Mancha (9,4%).

Los mayores incrementos porcentuales se produjeron en Extremadura (+15%), Madrid (+13,8%) y Cataluña (+10,1%), mientras que los mayores descensos se dieron en Canarias (-6%), Baleares (-3,7%) y Murcia (-3,2%).

Los grupos con mayores ventas en el conjunto del mercado fueron Repsol Butano (90,4%), Cepsa Gas Licuado (7,7%) y Galp (1%).

El número de clientes en el suministro regulado de GLP canalizado a finales de 2010 era de 599.337, lo que supone un crecimiento de unos 2.900 clientes (un 0,5%) con respecto a finales de 2009, cuando había 596.480 consumidores.

Por comunidades autónomas, las comunidades de Madrid y Galicia eran las que presentaban, al cierre del año pasado, un mayor número de clientes. A continuación les seguían un conjunto de siete comunidades con entre 30.000 y 60.000 clientes: Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía, Comunidad Valenciana, País Vasco y Cantabria

Los incrementos más importantes en términos absolutos se produjeron en Madrid (+1.236 clientes), Galicia (+1.212 clientes) y Cantabria (+819 clientes).

Los datos desglosados por comunidades autónomas indicaron que Repsol Butano es el principal suministrador en todas las comunidades autónomas, a excepción de Canarias, donde la empresa líder es Disa Gas, que suministra al 100% de los consumidores.

La actividad de suministro de GLP por canalización no se encuentra liberalizada, por lo cual todos los clientes se suministran a través de la empresa distribuidora titular de la red de distribución a la que están conectados, a precios regulados.

El documento de la CNE también señaló que entre diciembre de 2009 y diciembre de 2010 los precios regulados del GLP por canalización han experimentado un incremento del 29,25% en el término variable, mientras que el término fijo aumentó un 1,34%.

El gasóleo se encarece un 1% en la última semana y acumula subidas del 6,4% desde comienzos de año

Esta subida sitúa el precio de este combustible, consumido por el 80% del parque automovolístico español, en 1,264 euros el litro, y deja sin efecto la bajada de la semana pasada.

Por su parte, el precio de la gasolina registró esta semana su segundo descenso consecutivo y acumuló una caída del 2,2% desde comienzos de mes y del 4,5% desde el récord histórico de 1,381 euros el litro marcado a finales de abril.

En concreto, el litro de gasolina de 95 octanos cuesta en la actualidad 1,318 euros, un 0,4% menos que la semana pasada, y se situó en niveles similares a los de mediados de marzo, cuando este combustible estaba a punto de iniciar la escalada de precios que le condujo, en Semana Santa, al máximo histórico.

La gasolina y el gasóleo cuestan un 4,9% y un 6,4% más que a comienzos de año, así como un 12% y un 15%, respectivamente, más que en la misma semana del año pasado. En 2010, los combustibles se encarecieron en marzo, mantuvieron su precio durante el verano y volvieron a repuntar en octubre.

Con el escenario actual de precios, el automovilista con un vehículo de gasolina deberá dedicar 72,4 euros a llenar un depósito medio de 55 litros, cerca de 8 euros más que hace un año, mientras que en el caso del gasóleo el llenado asciende a 69,5 euros, nueve euros más que en el mismo momento de 2010.

El descenso en el precio de la gasolina coincide con un ligero abaratamiento en los últimos días del barril de crudo. El precio del barril de calidad Brent cotizó en 114 dólares, apenas un dólar menos que hace una semana, mientras que el barril de Texas bajó de 98 a 95,7 dólares en los últimos días.

Los precios de venta al público de los carburantes en España se encuentran por debajo de la media europea. De hecho, la gasolina alcanzó los 1,499 euros el litro en la Unión Europea de los 27 y los 1,513 euros en la zona euro. En el caso del gasóleo, el precio se situó en 1,366 euros en la Unión Europea de los 27 y en 1,347 euros en la eurozona.

La Comisión Europea pidió la semana pasada a España que reduzca las cotizaciones sociales de los trabajadores para disminuir los costes salariales, y que compense la reducción de ingresos con aumentos del IVA y de los impuestos sobre la energía, entre los que figuran los correspondientes a los combustibles de automoción.

La Oficina Antimonopolio anuncia una subida de precios de la luz en Alemania debido al apagón nuclear

«Los mercados cuentan con esa subida de precios y son los que mejor lo saben», señaló el presidente de dicha oficina, Andreas Mundt, en declaraciones que publicó el rotativo «Rheinischen Post«, en el que comentó que «los mercados usan ya hoy un lenguaje claro».

Recordó que los precios de la electricidad en Alemania aumentaron ya un 10 por ciento cuando el Gobierno de la canciller, Angela Merkel, dictó la moratoria nuclear tras la catástrofe de Fukushima por la que se ordenó desconectar de la red ocho plantas atómicas.

«Los precios no han retrocedido desde entonces», subrayó Mundt, mientras el ministerio federal de Economía espera que la subida de las tarifas eléctricas sea moderada como consecuencia del cambio de la política energética en Alemania.

Los expertos de su ministerio cuentan con una subida anual de entre 30 y 40 euros para un hogar de cuatro personas y no descartan que las subidas sean proporcionalmente mas elevadas para las grandes industrias consumidoras de electricidad.

Por su parte, la Presidencia húngara de turno de la Unión Europea pidió calma ante la decisión de Alemania de cerrar sus centrales nucleares en 2022 y consideró precipitado decir que supone un peligro para el suministro energético europeo.

El ministro de Energía húngaro, Tamas Fellegi, quien presidió por última vez el Consejo de Ministros europeos de esta materia en Luxemburgo, reconoció que la Unión Europea necesita contar con mecanismos que aseguren el abastecimiento para que decisiones como la alemana no tengan un impacto negativo.

Reclamó, no obstante, que no se exagere el impacto de la medida antes de haber hecho un análisis de la situación, en una rueda de prensa al término del encuentro.

«Los que hablan de miedo a un apagón energético en la Unión Europea están sacando conclusiones excesivamente precipitadas», afirmó.

En la misma línea se pronunció el comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, quien recordó que la nuclear sólo representa el 10 % del mercado energético alemán y menos del 3 % del de la Unión Europea.

Oettinger defendió no obstante hacer incluso más hincapié que hasta ahora en el desarrollo de fuentes energéticas renovables, así como en la construcción de redes modernas para reforzar la seguridad de suministro.

Asimismo, recordó la importancia de seguir colaborando con Rusia, principal exportador de gas a la Unión Europea (150.000 millones de metros cúbicos de gas al año, en un mercado de 500.000 millones) y de diversificar las fuentes de distribución y suministro.

En concreto, subrayó la necesidad de seguir afianzando las relaciones con países de la región del Caspio, Azerbaiyán, Turkmenistán e Irak.

Alemania sorprendió a finales de mayo con el anuncio del cierre progresivo de sus 17 centrales hasta el apagón nuclear total en 2022, una decisión que provocó cierta incomodidad entre los Veintisiete que consideraron que el Gobierno de la canciller Angela Merkel, de quien depende en exclusiva la decisión, podría al menos haber informado a sus colegas europeos.

La gasolina se abarata un 1,48% y el gasóleo un 0,40% esta semana

El litro de gasolina de 95 octanos redujo su precio en dos céntimos, con lo que se sitúa en 1,325 euros y acumuló una caída del 4% respecto al máximo histórico de 1,381 euros, alcanzado en Semana Santa.

La gasolina prosigue así la tendencia al abaratamiento que inicio tras Semana Santa, cuando la evolución de su precio se dio la vuelta tras más de un mes seguido de incrementos que le llevó a alcanzar el referido máximo histórico.

Por su parte, el precio del litro de gasóleo de automoción disminuyó en 0,5 céntimos de euro durante los últimos siete días, hasta situarse en 1,239 euros, y se consolida en niveles similares a los de febrero.

De esta forma, el automovilista con un vehículo de gasolina deberá dedicar 72,8 euros para llenar un depósito medio de 55 litros, por debajo de los 73,9 euros que era preciso emplear hace una semana, pero casi diez euros más respecto a los 63,7 euros de hace un año. En el caso de que el gasóleo, asciende a 68,14 euros, ligeramente inferior al de 68,4 euros de hace una semana.

Los precios de venta al público de los carburantes en España se encuentran por debajo de la media europea. De hecho, la gasolina alcanza los 1,517 euros el litro en la Unión Europea de los 27 y los 1,534 euros en la zona euro. En el caso del gasóleo, el precio se sitúa en 1,364 euros en la Unión Europea de los 27 y en 1,342 euros en la eurozona.

El precio máximo del gas licuado por canalización aumenta un 1,9%

Esta subida se suma a la del 3,7% de abril, así como a las del 3,4% de enero y 0,5% de marzo. En todo caso, el precio de este producto, que cayó un 9% en febrero, es en la actualidad un 0,8% inferior a los 106,42 céntimos de comienzos de año. En el conjunto de 2010, registró una subida del 26%.

Además, según el Boletín Oficial del Estado (BOE), el término fijo de este combustible mantiene su precio en 1,51 euros al mes, mientras que el precio del GLP canalizado para su distribución a granel subirá un 3,9%, hasta 91,51 céntimos por kilogramo.

La revisión de precios de los gases licuados por canalización se realiza mediante una fórmula automática que pondera el precio de la materia prima, el flete y la cotización entre el euro y el dólar.

El precio de gasolina y gasóleo cae hasta un 4% y se sitúa en niveles previos a los de la Semana Santa

Estas caídas se producen después de que la gasolina registrara cinco semanas consecutivas de máximos históricos y de que el gasóleo acumulara casi tres meses de niveles inéditos desde 2008.

El litro de gasolina se situó en 1,346 euros, un 2,5% menos que la semana pasada, cuando alcanzó el récord histórico de 1,381 euros el litro, con lo que regresa a los niveles anteriores a la segunda semana de abril.

Pese a esta caída, la gasolina acumuló un encarecimiento del 7% desde comienzos de año y del 13% con respecto a la misma semana de 2010. El llenado de un depósito medio de 55 litros cuesta ahora 74 euros, frente a 64,9 euros hace un año.

En cuanto al litro de gasóleo, esta semana registró un abaratamiento del 4%, hasta 1,241 euros, y se situó en niveles similares a la última semana de febrero. Hace una semana, este combustible marcaba un precio de 1,294 euros el litro, el mayor desde finales de 2008.

Con este escenario, el llenado de un depósito medio de gasóleo tiene un coste de 68,2 euros, frente a 60,2 euros hace un año. Además, este carburante cuesta un 4,5% más que a comienzos de año y un 13% más que en la misma semana de 2010.

El descenso en el precio de los combustibles se produce una semana después de que el crudo registrase también un abaratamiento de cerca de cinco dólares el barril. Esta semana, el Brent, de referencia en Europa, mantuvo esta tendencia y ha pasado de 118 a 111 dólares el barril, mientras que el Texas también se ha abaratado, de 106 a 97 dólares el barril.

Los precios de venta al público de los carburantes en España se encuentran por debajo de la media europea. De hecho, la gasolina alcanzó los 1,527 euros el litro en la Unión Europea de los 27 y los 1,542 euros en la zona euro. En el caso del gasóleo, el precio se situ´p en 1,374 euros en la Unión Europea de los 27 y en 1,349 euros en la eurozona.

Esta circunstancia se produce a pesar de que el precio sin impuestos en España es superior al de la media comunitaria. El nivel sin impuestos del litro de gasolina alcanzó los 0,698 euros en España, frente a los 0,674 euros en la Unión Europea de los 27, mientras que el gasóleo sin impuestos se sitúa en los 0,706 euros en España, frente a los 0,709 euros en la Unión Europea de los 27.