En concreto, la Tarifa de Último Recurso 1 (TUR 1) de gas natural, correspondiente por lo general a una vivienda con gas para cocina y calentamiento de agua, se incrementará un 0,99%, o 0,18 euros al mes sobre un recibo medio.
En cuanto a la TUR 2, en la que el gas se utiliza también como calefacción, la subida será del 1,26% o de 0,74 euros más al mes para un recibo medio. Estos importes incluyen el IVA.
El encarecimiento de las tarifas del gas responde a un incremento del 2,7% de los costes del gas. Las resoluciones con las revisiones de los precios de estos productos energéticos aparecen publicadas este viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El gas natural, de revisión trimestral conforme a una fórmula automática, ya subió un 5,7% en la anterior revisión en julio, así como un 4,1% en abril, de modo que acumula un encarecimiento del 12,1% en lo que va de año.
En la actualidad, hay unos 7,3 millones de clientes susceptibles de acogerse a la TUR de gas, de los que 3 millones ya lo hacen. De esta cifra, 1,8 millones están en la TUR 1 al consumir menos de 5.000 kilovatios hora (kWh), mientras que 1,2 millones disfrutan de la TUR 2, para consumos superiores a este volumen e inferiores a 50.000 kWh.
En el caso del butano, el Ministerio de Industria fijó un precio máximo de venta, antes de impuestos, para los suministros de gases licuados del petróleo envasados en recipientes de capacidad igual o superior a 8 Kg. e inferior a 20 Kg. de contenido de GLP, a excepción de los envases de mezcla para usos de los gases licuados del petróleo como carburante, que será de 102,3073 cents/Kg.
Trasladado este importe a la bombona media de 12,5 kilogramos, y añadido el IVA del 18%, el precio de la bombona se sitúa en 15,08 euros, frente a los 14,8 euros de la revisión de julio.
La bombona ya había subido un 5,7% a mediados de año y otro 6% en abril, lo que, sumado al nuevo encarecimiento del 1,96%, sitúa los incrementos en el 14,23%.
La subida del butano, que en el conjunto de 2010 fue del 16,6%, afectará a los entre ocho y 10 millones de usuarios que hay en España de este producto.
De hecho, la Asociación de Operadores de Gases Licuados del Petróleo (AOGLP) subrayó que el precio de la bombona de butano sigue siendo insuficiente para remunerar al sector y obliga a vender con pérdidas.
La asociación denunció que la fórmula que usa el Gobierno para determinar el precio de la bombona ha llevado al sector «a una profunda crisis» y que el nuevo coste para el cuarto trimestre sigue obligando a vender por debajo de los costes reales.
Según los cálculos del sector, en 2010 sólo los operadores perdieron más de 152 millones de euros y, a 31 de agosto de este año, ya se acumulaban 83 millones de euros en negativo.
De acuerdo con la asociación, por cada bombona de butano que se vende en España se están perdiendo en torno a dos euros de media.
La AOGLP interpuso un recurso ante el Tribunal Supremo contra la norma que determina el precio del butano, así como una denuncia ante la Unión Europea contra el reino de España por incumplimiento de las normas en materia de libertad de establecimiento.
En cuanto a la TUR de la luz, Industria aplicó una congelación en octubre después de rebajar los peajes eléctricos que recogen los costes regulados para neutralizar el encarecimiento de la electricidad. Cada una de estas dos variables tiene un peso cercano al 50% en la fórmula de revisión trimestral.
En lo que va de año, la tarifa subió en dos ocasiones. La primera, en enero, consistió en un incremento del 9,8% provocado por el encarecimiento de la energía y acompañado de una congelación de peajes. La segunda, el octubre, fue del 1,5%.
El gas y el butano acumulan subidas «brutales» de hasta el 17,9%, según Facua
Los precios del gas natural y del butano acumulan subidas del 15,9% y del 17,9% este año, respectivamente, lo que supone un incremento «brutal» que daña aún más la economía de los consumidores domésticos, aseguró el portavoz de Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez.
Estas cifras incluyen los incrementos que se registrarán a partir de octubre y obligan a los consumidores a desembolsar de media con respecto a enero 6,88 euros más al mes en el recibo de gas y 2,3 euros en la bombona de butano.
Para Sánchez, «la coyuntura económica de crisis que sufren muchos consumidores no hace razonable una subida en estos servicios». En este contexto, el Gobierno debería «recortar los márgenes de beneficio de las empresas del sector» para «no repercutir totalmente las subidas de costes» sobre el consumidor final, señaló.
Facua abogó por que en estos productos energéticos con precios regulados no solo se hagan revisiones basadas en «la matemática», sino que haya un margen de «política» para evitar que los consumidores domésticos asuman todo el coste.
«El Gobierno está castigando durantemente la capacidad económica de las familias en sectores como los de la electricidad y el gas para beneficiar a empresas con ganancias multimillonarias», aseguró.
Además, pidió tanto al partido del Gobierno como al candidato a sucederle que se comprometan a introducir en sus programas electorales otros instrumentos de cálculo en la revisión de tarifas que permitan garantizar la protección de los consumidores, sin que haya más liberalización.
La UCE advierte de que las subidas entorpecen la recuperación económica
Asimismo, la Unión de Consumidores de España (UCE) mostró su «más absoluto rechazo» a las subidas del gas natural y del butano y advirtió de sus efectos sobre las familias y, por tanto, sobre la demanda interna y el proceso de recuperación económica.
Para la organización, esta medida tiene consecuencias «catastróficas» sobre las economías domésticas y se suma a los incrementos ya aplicados durante el año.
En el caso del butano, señaló que sus usuarios «suelen ser, en su mayoría, familias de bajo poder adquisitivo o personas mayores con pocos ingresos, por lo que este incremento se ceba, una vez más, con los ciudadanos que más sufren la actual crisis».
Junto a esto, la UCE mostró su preocupación por «cómo se confirman, por parte de las autoridades competentes en la materia, el aval al sector energético y su posición dominante en el mercado».
«Que el Ejecutivo justifique estos incrementos en un encarecimiento de la materia prima no es razón suficiente para que siga permitiendo el encarecimiento de productos básicos para la ciudadanía», aseguró.
La UCE también consideró que el Gobierno está perdiendo una «oportunidad magnífica» de aliviar la situación económica de muchos hogares españoles.
«Medidas como las anunciadas paralizarán la reactivación de la economía, que en gran medida dependen de la dinamización del consumo interno», señaló, antes de considerar que la recuperación pasa por que los consumidores vuelvan a tener confianza en el mercado.