Carbunión aprecia el diálogo ofrecido por Industria, pero le pide que despeje la incertidumbre

En un comunicado, la patronal indica que el futuro del sector, incluidos el empleo y la actividad, depende de un acuerdo a medio y largo plazo entre Ministerio de Industria, empresas mineras y compañías eléctricas.

Tras la reunión, a la que han asistido por parte de Carbunión su presidente, Óscar Lapastora, y su directora general, Mercedes Martín, la asociación mantiene «una posición prudente» a la espera de que se conozcan con detalle varios parámetros importantes a la hora de elaborar y evaluar un plan 2013-2018.

«La patronal valora en cualquier caso que el Gobierno sea consciente de que existen minas de carbón en nuestro país con posibilidad de ser competitivas y continuar sin ayudas después de 2018«, afirma.

Carbunión señala además que el carbón es el único combustible fósil autóctono que posee España, lo que permite ahorrar más de 1.200 millones de euros en importaciones, y que este mineral contribuye además a la seguridad de suministro eléctrico y al mantenimiento del empleo en zonas cuya economía depende fuertemente de su extracción y consumo.

Ante la elaboración del futuro plan del carbón, que el Gobierno debe enviar en breve a la Comisión Europea, la patronal se muestra «preocupada por el volumen de ayudas que puedan ser destinados a cubrir los costes de producción, y que espera conocer en próximas reuniones».

«De la cuantía de estas ayudas depende la viabilidad futura de las diferentes unidades de producción, ya que la intención del sector es intentar pasar el filtro del año 2018 con el mayor número de empresas, producción y empleo posibles«, afirma.

Otro de los temas que preocupan a las empresas es la necesidad de contar con contratos a largo plazo de venta del mineral a las centrales térmicas, lo que no se produce en la actualidad porque las eléctricas no están comprando carbón nacional, indica.

Esta circunstancia se produce a pesar de que sí está en marcha el mecanismo de restricciones por garantía de suministro para el que se está utilizando carbón almacenado en los parques de las centrales.

Carbunión señala además que las empresas mineras están actualmente en una situación «muy complicada» debido a la falta de venta de carbón, ya que algunas eléctricas han planteado recursos en la Audiencia Nacional en los que piden medidas cautelares contra la resolución anual en la que se fijan las cantidades anuales de quema de carbón en 2013.

SOMA considera «irrenunciables» el pago de las ayudas al carbón y su mantenimiento hasta 2018

El sindicato minero SOMA, integrado en la federación SOMA-FITAG-UGT, ha insisito en que considera «irrenunciables» los pagos de ayudas al carbón referentes a 2012, su convocatoria para 2013 y su mantenimiento al menos hasta 2018. Además, ha exigido la continuidad de la actividad de la empresa Hunosa.

Así lo ha señalado en una nota de prensa, tras una reunión celebrada entre los representantes de la Federación y la dirección del SOMA, en su sede de Langreo, en la que se han aclarado los puntos tratados en la reunión con Alberto Nadal, secretario de Estado de Energía.

Ha dejado claro los puntos irrenunciables: la normalización del el sector, con el pago de las ayudas correspondientes al año 2012 -a todas las empresas- y la convocatoria de las mismas para 2013, así como su continuidad de las mismas hasta 2018, como recoge el único documento «oficial» de la UE, que es la Decisión del Consejo 2010/787/UE.

Se trata de propuestas a incluir en el nuevo marco regulador que presenta el Gobierno, para que «de una vez por todas, se garantice la estabilidad y el empleo del sector y la posibilidad de recuperación y transformación de la estructura socioeconómica de las comarcas mineras y de todo el conjunto de la región», señala el sindicato.

En esta línea, también propone para la empresa Hunosa «reclamar su papel como instrumento clave para mantener o incrementar el porcentaje de producción autóctona de energía, que asegure una reserva estratégica por la que venimos apostando desde hace ya mucho tiempo».

Apuesta también el sindicato por «un marco regulador que, en su parte territorial debe contribuir a la continuidad en el cambio de la estructura socioeconómica de las Comarcas Mineras, progresando en la reactivación -corrigiendo los errores pasados- recuperando ayudas a la formación y becas; creando un modelo empresarial fuerte, innovador y competitivo capaz de generar empleo estable y de calidad así como la continuación del trabajo en infraestructuras; todo ello con el objeto de no condenar a unos territorios al paro, el despoblamiento y la desolación. Todo ello complementado con el mantenimiento de un pacto social, que garantice una salida no traumática de excedentes».

El comunicado ha acusado al Gobierno de Rajoy de «abocar al sector al cierre, y a las comarcas mineras a la desolación y al paro». Además, entiende que «ahora da un paso más en el proceso de desmantelamiento del estado de bienestar, social y de derecho, con una persecución a los prejubilados, basada en la ruptura de los acuerdos individuales firmados, y con medidas que menoscaban el colchón de rentas existentes que supone el sustento de familias enteras, en unas Comarcas Mineras que presentan unos dramáticos índices de paro, superior a la media nacional, así como un cada vez más pronunciado despoblamiento».

La próxima semana, las organizaciones sindicales, mantendrán asambleas conjuntas, en los distintos centros de trabajo, con el fin de informar a todos los trabajadores y trabajadoras.

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