BP pagará 3.500 millones de euros adicionales tras admitir su culpa en el vertido del Golfo de México
La compañía anunció que alcanzó un acuerdo con el Gobierno de Estados Unidos que, a falta del visto bueno definitivo de un juez, supondrá la resolución de todos los cargos que pesaban contra BP y de las reclamaciones económicas planteadas por las autoridades federales, aunque no cubrirá las demandas civiles.
El 20 de abril de 2010, la exploxión de la plataforma Deepwater Horizon causó la muerte de once trabajadores y el vertido de millones de barriles de crudo en el Golfo de México durante 87 días. Para hacer frente a los costes derivados del suceso, la petrolera llevó a cabo un proceso de desinversión, sobre todo de sus activos en Estados Unidos, para recaudar unos 28.000 millones de euros.
La petrolera accedió a declararse culpable de once cargos de delito grave por negligencia relativos a la muerte de once trabajadores de la plataforma. Además, admitirá otros tres delitos por la contaminación del agua y de las especies de la zona y por obstrucción al Congreso.
Este reconocimiento de culpa supondrá el pago adicional a las autoridades federales de 3.500 millones de euros, considerada la multa más alta de la historia judicial norteamericana. El pago se realizará a plazos durante un periodo de cinco años.
Al margen del compromiso económico, BP también accedió a adoptar medidas adicionales para mejorar la seguridad de sus instalaciones, que deberán someterse a análisis externos y contar con mejores equipos y protocolos de respuesta en caso de accidentes.
El consejero delegado de BP, Bob Dudley, volvió a lamentar las muertes y el desastre medioambiental producido por la explosión de la plataforma y pidió disculpas. El acuerdo representa que «hemos aceptado la responsabilidad por nuestras acciones», destacó Dudley, quien defendió que la compañía respondió tanto al vertido como a las reclamaciones posteriores.
«Creemos que esta resolución es lo mejor tanto para BP como para sus accionistas«, aseguró, por su parte, el presidente de la petrolera, Carl-Henric Svanberg. En este sentido, defendió el compromiso de la compañía para salir «más segura» y «más fuerte» de este desastre, considerado la peor tragedia medioambiental de la historia de Estados Unidos.



Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir