Anpier se reunirá con Industria para denunciar el estado de «extrema gravedad» en el que se encuentra el sector fotovoltaico

La Asociación apuntó que en el encuentro, que comenzará a las 12.00 horas, estará representada por su presidente, Miguel Ángel Martínez-Aroca que abordará la situación de «extrema gravedad» que viven miles de familias que invirtieron en renovables y que han visto reducidos sus ingresos en un 38% desde 2010 debido a los sucesivos cambios regulatorios.

La asociación aseguró que las medidas «precipitarán la quiebra de la gran mayoría de las instalaciones del país que, en más de un 80%, desarrollaron sus proyectos con financiación bancaria», según indicó, antes de asegurar que no entiende «que se rescate a grandes inversores especulativos» al tiempo que «se cercena la la rentabilidad de la inversión ética realizada por 55.000 familias.

Martínez-Aroca sostuvo en la rueda de prensa de las asociaciones de renovables celebrada este jueves que «muchas familias» se encuentran «arruinadas» por el «engaño de una retribución publicada en el BOE que se recortaron posteriormente de forma «retroactiva».

Las plantas, señaló Anpier, afrontan una merma «inesperada» de los ingresos, a la que se suma la congelación de actualización de tarifas.

En este sentido, el presidente de Anpier aseguró que los pequeños productores están «en la ruina» tras ver reducida la retribución prevista inicialmente. «Nuestro premio ha sido abandonarnos en la cuneta», aseguró.

«La financiación es la última fase del estrangulamiento de la soga», lamentó Martínez-Aroca, quien aseguró que «la banca no está siendo sensible con la situación que están sufriendo cientos de miles de familias».

«Aprevechan la situación para endurecer las condiciones y subir los tipos de interés. No hay sensibilidad ni apoyo de la banca, y estamos trasladando la situación al Gobierno y pidiendo una línea ICO, pero la respuesta es no«, señaló.

Por todo ello, consideró que la mayoría de los proyectos renovables se verán abocados a la quiebra en los próximos meses, lo que supondrá perder no solo la planta, sino también todos los bienes con los que avalaron su inversión.

En su opinión, la quiebra generalizada del sector repercutiría en un daño en el sistema financiero, ya que cifraron los créditos concedidos a este tipo de proyectos en 14.500 millones de euros.

Por otra parte, la asociación pidió al Gobierno que explique a la ciudadanía «cuáles son los costes reales del sistema», después de que la patronal de las grandes eléctricas Unesa culpara a las renovables de la generación del déficit de tarifa.

En ese sentido, Anpier consideró que «se debería retribuir cada tipo de energía en función de sus costes reales de producción» en lugar de abonar a todas el precio de la tecnología más cara, como sucede con el actual mecanismo de mercado.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *