La tecnología Arabelle de Alstom -adaptada para cualquier reactor- será la base de las turbinas y alternadores de las centrales del tipo AP 1000 que se proyectan en China, explicó la sociedad francesa.

La empresa subrayó que el compromiso, suscrito en la ciudad china de Chengdu por su presidente, Patrick Kron, y por el de DEC, Wang Ji, tiene «una importancia estratégica» para ambas en un momento en el que China reanuda la construcción de centrales nucleares.

El país proyecta un crecimiento regular del sector y para ello uno de sus principales estándares es el AP 1000, un reactor de agua a presión de tercera generación.

El primer contrato en el marco de este acuerdo se firmará «próximamente», señaló Alstom, que recordó que lleva más de 20 años en el mercado de la energía atómica de China, y fabricó más de la mitad de las turbinas y alternadores que hay en el país, incluidos los de Ling Ao, Taishan y Hongyanhe.