Soria prevé llevar su proyecto de ley eléctrica al Consejo de Ministros del viernes y mantendrá el peaje de respaldo al autoconsumo eléctrico

Según indicó el ministro a la prensa antes de participar en un almuerzo organizado por Gestiona Fórum, el anteproyecto de ley del sector eléctrico ya recibió el informe de la CNE y de la CNC y «previsiblemente irá esta semana al Consejo de Ministros» con el objetivo de iniciar su tramitación parlamentaria y de que, con el resto de reales decretos relacionadas con el sector energético, pueda entrar en vigor el 1 de enero de 2014.

Al ser preguntado acerca del nuevo «peaje de respaldo» al autoconsumo y su posible mantenimiento, insistió en la necesidad de que los consumidores «paguen» por el uso de la red. «Es una práctica habitual y aunque respeto mucho la decisión o la opinión de la CNC, pero estará conmigo en que si alguien utiliza algo tiene que pagar por la utilización de ese algo», afirmó el ministro en referencia a la infraestructura de la red del transporte.

De este modo, Soria se hizo eco de las críticas realizadas por Competencia, que en su informe sobre el anteproyecto de ley energética se mostró contraria a la imposición de trabas innecesarias y desproporcionadas para los usuarios que quieren acogerse al autoconsumo eléctrico.

Frente a este informe, en el que se consideró al «peaje de respaldo» arbitrario y no proporcional, Soria aseguró que «el Gobierno es muy partidario del autoconsumo» y, además, éste se regula por primera vez en España.

El ministro explicó que el autoconsumo consiste en que alguien, si quiere, se ponga una placa solar en su casa y aquello que consume se lo produzca, y «hasta ahí, creo que todos estamos de acuerdo por muchas razones, porque eso impulsa la energía limpia y también supone una forma de abaratar los costes«, resaltó.

Sin embargo, prosiguió, si esa persona que instala una placa solar en su casa, además quiere que, cuando le sobra energía verterla al resto del sistema y, cuando lo hace, utiliza la infraestructura de la red del transporte, es fundamental que «contribuya a pagar» esa red «que pagamos todos los demás». «Si la usa y no la paga, significa que todos los demás le financian parte del autoconsumo», denunció el titular de Industria.

Por todo ello, Soria argumentó que «uno de los objetivos de la reforma es impulsar la competencia en el sector y que haya más compañías que puedan generar y distribuir».

El ministro también reconoció la «dificultad» de asumir la reciente reforma energética por parte de las empresas, los consumidores y la Administración, pero defendió su conveniencia y se mostró convencido de que no presentará problemas legales.

«Creemos que la reforma se ha hecho siguiendo el principio de la legalidad y atendiendo al interés general, que es el que el Gobierno debe defender», señaló Soria.

De hecho, el ministro aseguró que la reforma pretende tres objetivos concretos: dar certidumbre al sistema, hacerlo sostenible y ajustar los precios, aunque reconoció que «que no va a contentar a todo el mundo y que es difícil de aplicar» por todos los actores implicados, pero era necesaria, insistió.

FerroAtlántica pide que la reforma no suponga más sacrificios

Por su parte, FerroAtlántica, empresa del Grupo Villar Mir, pidió que la reforma energética aprobada recientemente por el Gobierno no exija a la industria y los consumidores «sacrificios mayores de los ya realizados».

Durante un almuerzo con el Ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, el presidente ejecutivo de FerroAtlántica, Pedro Larrea, recordó que desde el inicio de la crisis han aguantado un incremento en los precios de la energía del 65% en industrias para las cuales la energía supone un 40% de los costes.

«La energía cuesta en España el doble de otros países de nuestro entorno, como Francia, y sólo es más cara en Chipre e Irlanda», lamentó, al tiempo que añadió que la industria española es el agente del sector eléctrico que más sacrificios realizó en estos últimos años, a pesar de ser el que más está contribuyendo a la salida de la crisis.

En este sentido, reclamó que el sector eléctrico español sea tan competitivo como el de los países de nuestro entorno, aunque mostró su preocupación por algunas disposiciones recogidas en los borradores de normativa, concretamente la referida a la gestión de la demanda.

FerroAtlántica tiene 15 fábricas en cinco países: seis en Francia, cinco en España, dos en Sudáfrica, una en Venezuela y otra en China. Es el primer productor mundial de silicio metal y uno de los principales fabricantes internacionales de ferroaleaciones.