Soria afirma que el principio de acuerdo entre Repsol y Argentina «despeja muchas incertidumbres»

Soria se felicitó de que las partes estén a punto de «cerrar un acuerdo para ponerle un valor al importe de la expropiación que hizo el Gobierno argentino de las acciones de YPF que tenía Repsol».

Aunque advirtió de que ese acuerdo tiene que ser aún refrendado por los órganos de la empresa y por el Gobierno argentino, Soria consideró que el hecho de que se haya llegado a él «es importante porque despeja incertidumbres e introduce seguridad, tanto desde el punto de vista de la empresa como del país».

Por su parte, el Consejo de Administración de Repsol estudiará esta semana el estado de las negociaciones con el Gobierno argentino para determinar una compensación por la expropiación de YPF, al tiempo que aprobará las cuentas del ejercicio 2013.

En los últimos días se multiplicaron los rumores que apuntan a un acuerdo inminente, aunque desde la petrolera sólo reconocen que continúan las negociaciones para concretar el principio de acuerdo alcanzado en noviembre.

En ese momento, un año y medio después de la expropiación del 51% de las acciones de YPF, todas ellas de Repsol, se selló un principio de acuerdo que consistiría en una compensación de 3.700 millones de euros en deuda argentina.

Aunque la cantidad está muy por debajo de la cifra inicialmente reclamada por Repsol, el acuerdo estaría dentro de los límites fijados por la petrolera y, sobre todo, cumpliría con el requisito de tener liquidez.

Asimismo, no recoge ningún pago a través de activos de la región de yacimientos de crudo de Vaca Muerta, una opción planteada el pasado verano por Pemex, accionista de Repsol, y rechazada por el Consejo de la petrolera presidida por Antonio Brufau.

Tras ese principio de acuerdo con Argentina se iniciaron negociaciones para cerrar cómo se articularía ese pago e incluir garantías de cobro, que hoy continúan.

A cierre de septiembre, Repsol tenía apuntada en sus cuentas la participación nacionalizada de YPF como «activos no corrientes mantenidos para la venta sujetos a expropiación» con una valoración de 5.264 millones de euros.

Sin embargo, esta semana, en base a ese principio alcanzado, Repsol redujo la valoración de estas acciones hasta unos 3.700 millones de euros y dotó esa provisión por la diferencia.

Esta provisión marcará los resultados anuales, que Repsol presenta este miércoles y que ya contemplan un ajuste de 1.279 millones de euros derivado del inminente cierre del acuerdo para la compensación por la expropiación de YPF.

Tanto las cuentas, con la provisión incluida, como ese eventual acuerdo definitivo por la compensación de YPF se verán en la reunión del Consejo de Administración de Repsol que esta semana se adelantara al martes.