El PSOE pide al Gobierno un pacto sobre energía que apueste por la eficiencia y por las renovables

Junto a esto, Alique lamentó las medidas adoptadas por el Ejecutivo acerca de las tecnologías «verdes» y acusó al Gobierno de «criminalizar y condenar a la marginalidad» a las energías renovables.

El senador aprovechará la próxima sesión plenaria de la Cámara Alta para defender una moción consecuencia de interpelación en la que pedirá al Gobierno que impulse este pacto. El acuerdo debería a su juicio incluir medidas para garantizar la competitividad, la seguridad y la sostenibilidad energética del país, así como las medidas de impulso a la eficiencia y las renovables.

Sobre este último aspecto, consideró que la norma debería trazar una senda de futuro congruente con los compromisos asumidos por España en esta materia con la Unión Europea.

A través de esta iniciativa, Alique también reclamará al Ejecutivo dotar al Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) de los recursos necesarios para continuar aplicando una estrategia de ahorro y eficiencia energética, que cuente con la participación de comunidades autónomas y municipios, y que se sitúe entre las prioridades de nuestra política energética.

Además, propondrá renovar el parque de viviendas para hacerlo mucho más eficiente desde el punto de vista energético, mediante la promoción de auditorías energéticas, aislamiento de edificios y otras medidas que contribuyan a reducir el consumo, al tiempo que las habiliten como puntos de generación, lo cual puede dinamizar notablemente el sector de la construcción.

Por último, solicitará impulsar «cambios sustanciales» en los patrones de movilidad, basados actualmente en un uso intensivo del automóvil privado. Alique defenderá una movilidad sostenible en la que el transporte público juegue un papel fundamental y en la que se consolide a medio plazo un mercado de servicios energético.

«España está en riesgo de ser una anomalía energética en la UE»

Por su parte, el secretario federal de Medio Ambiente del PSOE, Hugo Morán, consideró que España está en riesgo de convertirse en una «anomalía energética» dentro de la Unión Europea, al dejar de lado las energías renovables, potenciar las nucleares y permitir la práctica de fractura hidráulica («fracking») para sondear bolsas de gas.

Morán consideró que el Gobierno español rompió la dinámica de los años anteriores, en los que lideraba la penetración de las energías renovables dentro del paquete energético en Europa.

El dirigente socialista consideró «ilógico» que España frene ahora el avance de las energías renovables, cuando la Unión Europea diseñó un itinerario en el sentido inverso y fijado para ello un horizonte en 2050.

Morán advirtió también del riesgo de que las restricciones a las energías renovables terminen por ocasionar problemas graves a pequeñas empresas y a familias que, en algunos casos, llegaron a hipotecar sus viviendas para proyectos vinculados a ellas y ahora ven que dejan de ser rentables.

A su juicio, otra prueba de que el actual Gobierno español va «a contracorriente» es que sigue apostando por la energía nuclear, cuando en Alemania, que lidera Europa en el plano económico y energético, decidió acortar la vida de sus centrales nucleares.

En su opinión, ocurre algo parecido con el «fracking», «prohibido o muy limitado en otros países» mientras en España «no se ha hecho una valoración profunda de esta técnica».

El secretario federal de Medio Ambiente reclamó la creación de un grupo de expertos para elaborar un informe sobre esta técnica de extracción de gas y que se debata en las Cortes antes de tomar una decisión.

Además dijo que esta técnica puede ser buena en algunas zonas del mundo donde hay grandes superficies deshabitadas, pero no parece compatible con territorios muy poblados, como en España, donde cualquier contaminación afectaría directamente a la población.

Respecto a los proyectos para extraer gas mediante la fractura hidráulica en la comarca burgalesa de Las Merindades y su entorno, próximo a la central nuclear de Garoña, Morán consideró que se debería prohibir y explicó que empresas como las centrales nucleares suponen un «monocultivo» para su entorno porque ponen a la zona una «etiqueta poco atractiva», por lo que estimó que sería «injusto» volver a permitir en la zona otra explotación que es «incluso más agresiva con el entorno que la planta nuclear».

Piden a Soria que reciba a los alcaldes del entorno de Garoña y que informe sobre el futuro del carbón

Asimismo, el PSOE pidió en una carta al ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, que reciba a los alcaldes del entorno de la central nuclear de Santa María de Garoña, en el norte de Burgos, para informar de qué planes tiene para reactivar la zona una vez que cierre la planta, según confirmó el diputado socialista por Burgos, Luis Tudanca, que criticó el «oscurantismo» con que se está tratando todo lo relacionado con el cierre de la planta de Santa María de Garoña.

Por su parte, Morán afirmó que esta falta de información se debe a que el Gobierno está negociando con las empresas eléctricas para dar «un giro» a su política energética y ampliar la vida útil de las centrales nucleares españolas hasta los sesenta años, lo que también afectaría a Garoña, según señaló, antes de asegurar que todo el parque nuclear español debería tener un plan de reactivación de los territorios del entorno de cada planta.

En su opinión, estos planes deberían incluirse en las condiciones de apertura de todas las actividades que puedan afectar a su entorno y frenar vías alternativas de desarrollo.

Morán estimó que en el caso de Garoña, el Gobierno anuló el plan de reactivación, puesto en marcha en la pasada legislatura, «por un capricho» que llevó a un empeño en revocar la orden de cierre de la central nuclear y que ahora no se corrige, pese a que los responsables de la planta la han parado y la orden de cierre en julio sigue vigente.

Asimismo, el PSOE registró en el Congreso una petición de comparecencia de Soria, ante la comisión parlamentaria del ramo para informar sobre los planes que tiene para el futuro de la minería del carbón, ante la «grave situación» del sector y la «negativa» del secretario de Estado Álvaro Nadal a reunirse con un grupo de diputados socialistas, de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) y Foro Asturias (FAC).