La petrolera franco-belga Total anunció que su beneficio neto en el primer trimestre del año fue de 2.290 millones de euros, un 36 por ciento menos que en el mismo periodo de 2008, ante la caída de los precios del crudo y la bajada de la producción.

El presidente de la empresa, Christophe de Margerie, aseguró en un comunicado que el resultado neto ajustado cayó un 44%, lo que supone el menor impacto de la crisis económica entre las principales petroleras del mundo.

«Las cifras muestran la calidad de resistencia y la solidez financiera del grupo, así como su capacidad para continuar su desarrollo en un contexto degradado», señaló.

Los precios del crudo se redujeron un 50 por ciento con respecto al primer trimestre de 2008 y un 20 por ciento en relación al cuarto trimestre de ese año, a lo que se sumó una «bajada significativa» de los precios del gas y una «progresiva degradación» de los márgenes de refinado.

Además, su producción se redujo en el periodo fruto de las decisiones adoptadas por la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) para sostener los precios.

La petrolera facturó en el periodo 30.041 millones de euros, un 32 por ciento menos, mientras que el resultado operativo neto alcanzó los 2.050 millones, un 36 por ciento menos.