Concretamente, el costo de cada kilovatio tendrá un recargo que hará que el consumo de energía por hogar suba una media de nueve euros al año.

Los fondos recaudados deberán destinarse a resolver los problemas de conexión a las redes eléctricas de los parques eólicos en el Mar del Norte y en el Mar Báltico.

Según la agenda energética del Gobierno, los parques eólicos situados en el mar deberán, a más tardar en 2020, generar 10.000 megavatios.

Esa meta actualmente se ve como difícil debido a los problemas que hay con la conexión a las redes de distribución eléctrica, que en gran parte deben ser de nueva construcción.

El proyecto de ley aprobado, preparado por los ministerios de Medioambiente y Economía, tiene como objetivo clave impulsar la ampliación de las redes de distribución de energía para subsanar así los problemas de conexión.