Fuentes de la compañía explicaron que, por el momento, se desconoce cómo afectará esta medida a España, donde Vestas está presente desde 1989 y emplea a unas 2.000 personas.

El fabricante danés cuenta en el país con cinco fábricas en Viveiro (Lugo), Villadangos del Páramo (León), Daimiel (Ciudad Real), Olvega (Soria) y Barcelona, así como con oficinas comerciales en Madrid y varios centros logísticos, que hasta ahora no se vieron afectados por despidos colectivos, según la misma fuente.

La medida anunciada contribuirá a «asegurar» que la compañía dé beneficios en 2013, recortando 250 millones de euros en gastos, y se une al despido de 2.335 trabajadores anunciado hace unos meses, con lo que plantilla quedará reducida a 19.000 empleados a finales de 2012.

Vestas perdió 230 millones de euros brutos entre enero y junio, frente a los 42 millones de euros del primer semestre de 2011.

La pérdida neta de explotación (ebit) se situó en 227 millones de euros, cuando un año antes había registrado un valor positivo de 8 millones de euros, mientras que la facturación aumentó en cambio un 10% hasta 2.716 millones de euros.

El grupo eólico danés tenía a 30 de junio pasado una deuda neta por valor de 1.147 millones de euros, un 7% más.

La pérdida neta en el segundo trimestre fue de 8 millones de euros, frente a un beneficio de 55 millones de euros un año antes.

Vestas perdió 5 millones de euros brutos entre abril y junio, cuando en el mismo período de 2011 había ganado 76 millones de euros.

El ebit pasó de 77 a 18 millones de euros, lo que supone una bajada del 77%, mientras que la facturación fue de 1.611 millones de euros, un 15% más.