La CNE cree que las ayudas al carbón ponen en riesgo a las centrales de gas

El Consejo de la CNE aprobó, en una reunión extraordinaria, dieciséis objeciones al Real Decreto que regula las ayudas al carbón nacional, un texto que ya había sido modificado por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio según el dictamen de la Comisión Europea (UE).

Bruselas dio el visto bueno a la puesta en marcha del denominado procedimiento de resolución de restricciones por garantía de suministro, con el que se quiere favorecer la quema de carbón nacional en las centrales eléctricas, aunque pidió que se retiren las compensaciones previstas para las plantas perjudicadas.

El mecanismo de resolución de restricciones permite modificar el programa diario del mercado eléctrico para cumplir los criterios de seguridad de suministro y primar las fuentes autóctonas hasta cubrir el 15 por ciento de la demanda.

La Comisión señaló en su reunión que las centrales de ciclo combinado, que son las que funcionan con gas, han necesitado grandes inversiones para su puesta en funcionamiento y ahora no van a poder recuperarlas porque su producción estará limitada.

Para evitar esos cierres, que afectarían a la seguridad del sistema eléctrico, la CNE propone que se realice un pago por garantía de potencia que complemente el precio del mercado.

También con el objetivo de mantener la presencia de las centrales de ciclo combinado y carbón importado en el sistema eléctrico, el regulador pide a Industria que permita a estas plantas participar en el mercado intradiario, el que vende la energía para el mismo el día, algo prohibido en la modificación actual del Real Decreto.

Además, el nuevo texto elimina los pagos por lucro cesante e incluye otros incentivos que, según la Comisión, alterarán el mercado de la electricidad, por lo que apuesta por mantener todas las centrales por encima de su mínimo técnico, es decir, con una producción suficiente para no tener que parar.

La CNE también pide a Industria que explique con claridad los criterios seguidos para la selección de las centrales de carbón que recibirán las ayudas.

Según la Comisión, la nueva versión del Real Decreto no menciona el Plan Nacional de Reserva Estratégica de Carbón 2006-2012, de manera que la producción de electricidad procedente de carbón nacional dependerá en exclusiva de la decisión del secretario de Estado de Energía.

Esto podría abrir la puerta a una utilización de carbón autóctono incluso superior a la establecida por el Plan, algo que tendría un «impacto económico para los agentes y para el sector eléctrico en su conjunto, así como desde el punto de vista medioambiental».