El primer taxi eléctrico de España surge con el fin de abaratar costes
«Ha bajado mucho el trabajo y los costes son cada vez mayores. El mayor gasto que tenemos es en gasolina. El gasto es de un euro en consumo de electricidad cada cien kilómetros» apuntó San José en la presentación del vehículo.
Al respecto, reconoció que también existe un ahorro en «mantenimiento», que se reduce «prácticamente a cero», ya que «tiene que dar menos averías que un motor de combustión».
Asimismo, detalló que cada carga, de unas ocho horas, viene a costar unos 1,30 euros, con la que tiene unos 120 kilómetros de autonomía.
De hecho, el precio del coche, una vez restada la subvención de 6.000 euros del Ministerio de Industria, ronda los 30.000, y «en dos años amortiza» la diferencia respecto a su anterior vehículo.
«El vehículo anterior, de alta gama, me costó 28.000 euros. Éste me sale por 2.000 euros más, pero con el ahorro que conlleva, en dos años lo amortizo. La diferencia de precio no es tan grande comparada con los ahorros en gastos«, explicó San José.
Además, indicó que pese a que puede que una carga, que efectúa en el garaje de su casa, no le dé para una jornada de trabajo completa, existen los puntos de recarga, 34 esparcidos en toda la ciudad de Valladolid, con los que recuperar la electricidad consumida.
Asimismo, dejó claro que no reducirá la tarifa de sus servicios ni tiene por qué hacerlo, dado que se trata de «abaratar los gastos». «En un año se nos ha subido la gasolina un 30% y nosotros no hemos encarecido las tarifas un 30%», argumentó.
A la presentación de este primer taxi cien por cien eléctrico acudió el alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva (PP), quien felicitó a Roberto San José por su «valentía».
Al mismo tiempo, expresó su convencimiento de que «a medio plazo en el casco histórico de las grandes ciudades sólo se va a poder entrar con automóviles no contaminantes».
León de la Riva destacó que el consumo de este tipo de coches «es muy bajo» y el grado de «contaminación es cero», y denunció que la Unión Europea «sigue sin cumplir sus compromisos, pues en 2010 iban a estar homologados los sistemas de recarga. Llevamos año y medio y no se ha hecho absolutamente nada», concluyó.




Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir