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Podemos pide librar a los hogares vulnerables de la refacturación de la tarifa regulada para corregir el margen de comercialización

Europa Press.- Podemos En Comú criticó que el Gobierno haya autorizado a las compañías eléctricas la refacturación en un solo recibo de las tarifas que, a lo largo de tres años, se aplicaron erróneamente porque el Gobierno no calculó correctamente el coste de la comercialización de la energía eléctrica de la tarifa semirregulada (PVPC), y pide fraccionar el pago y que se exima a los hogares vulnerables.

La refacturación se sustenta en tres sentencias dictadas por el Tribunal Supremo en las que se obliga al Gobierno a elaborar una nueva metodología para calcular el margen de comercialización del PVPC. A partir de ello, el Gobierno aprobó un modelo de comunicación que las compañías deben remitir a los usuarios para informarles de los motivos del reajuste en el cobro en el que, lamenta Podemos, «les ha dado libertad para decidir si lo aplican a lo largo de varios recibos o en uno solo».

Por todo esto, la formación catalana, a través de su portavoz de Energía en el Congreso, Josep Vendrell, registró en la Cámara Baja una batería de preguntas para comprobar si el Gobierno conoce los efectos de cargar en una sola factura esta desviación en el cálculo de la factura y para saber las razones por las que el Ejecutivo no excluyó de esta decisión a los beneficiarios del bono social.

Para Vendrell, esta decisión «refleja una nula sensibilidad con aquellos consumidores que atraviesan una grave situación económica y que habitualmente ya tienen dificultades para hacer frente a los recibos». «Ni siquiera se han tenido en consideración a los beneficiarios del bono social, a los que el cobro de las cantidades también se les estaría aplicando íntegramente», lamenta el diputado catalán.

El nuevo bono social costará unos 230 millones de euros e impondrá límites a cada beneficiario del consumo bonificado

Europa Press.- El nuevo bono social de la electricidad tendrá un coste de entre 203 y 235 millones de euros, frente al de entre 180 y 200 millones actual, y aspira a proteger a unos 2,5 millones de hogares en situación de vulnerabilidad, explicó el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia. También se limitará el consumo bonificado, es decir, el número de kilovatios hora (kWh) que se ve beneficiado del descuento que supone el bono social.

Por ejemplo, el derecho a percibir el bono social de la luz para las familias numerosas estará limitado a un consumo de energía de 3.600 kilovatios hora (kWh) al año, según consta en el borrador del decreto por el que se regula el bono social. Concretamente, este descuento tanto para los considerados como consumidores vulnerables, que asciende al 25% del recibo, como para los vulnerables severos, que será del 40% de la factura, será aplicado teniendo en cuenta el límite de energía suministrada previsto para el periodo de facturación. Por encima de este límite, la energía suministrada le será facturada según la tarifa regulada PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor).

Este límite máximo de energía bonificada para cada una de las categorías de consumidores se calculará prorrateando la energía anual máxima establecida para cada una de ellas entre el número de días que conforman el período de facturación. Así, para el caso de las familias numerosas, este límite máximo será de 3.600 kWh al año por hogar, mientras que para las unidades familiares en que sus miembros sean pensionistas del Sistema de la Seguridad Social por jubilación o incapacidad permanente, percibiendo por ello la cuantía mínima vigente en cada momento para dichas clases de pensión, será de 1.680 kWh anuales.

El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, señaló que al final el Gobierno ha considerado «que era mejor» incluir a las familias numerosas, aunque subrayó que el derecho al bono social «va a tener limitado el consumo» y «no se van a financiar lujos». «Un consumo normal de una familia normal. El bono social es para niveles de consumo habituales«, aseveró. Energía ha remitido a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), para su preceptivo informe, el borrador de real decreto que desarrolla el bono social de electricidad, después de definir los criterios de renta para que sea percibido.

Para que un consumidor sea considerado vulnerable y pueda acogerse al bono social que le da acceso a un descuento del 25% en su factura, se tendrá en cuenta el nivel de renta de su unidad familiar referido al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM). En concreto, podrán acceder al bono social las unidades familiares sin menores a cargo que tengan una renta anual menor o igual a 1,5 veces el IPREM, las unidades familiares con un menor a cargo que dispongan de una renta anual menor o igual a 2 veces el IPREM, así como aquellas que cuenten con dos menores a cargo y que ingresen una renta anual menor o igual a 2,5 veces el IPREM.

Además, los umbrales de renta anteriores se verán incrementados en 0,5 veces el IPREM para las víctimas de violencia de género, víctimas del terrorismo y para aquellos hogares con algún miembro con una discapacidad superior al 33%. Asimismo, podrán acogerse al bono social, además de todas las familias numerosas, aquellas unidades familiares en las que todos los miembros que tengan ingresos sean pensionistas del Sistema de la Seguridad Social por jubilación o incapacidad permanente, percibiendo por ello la cuantía mínima.

Para el caso de los consumidores vulnerables conformado por una unidad familiar sin menores que tengan una renta anual menor o igual a 1,5 veces el IPREM, que en 2017 se sitúa en unos 7.455 euros al año en 14 pagas, este límite máximo de consumo para tener derecho al bono social será de 1.200 kWh al año, mientras que para las unidades familiares con dos menores y que cumplan los criterios de renta será de 2.040 kWh anuales y para las familias con un menor y que puedan por renta acogerse a la ayuda será de 1.680 kWh anuales.

Por otra parte, se crea una nueva categoría, los consumidores vulnerables severos, para aquellos hogares con rentas inferiores al 50% de los umbrales establecidos para los consumidores vulnerables. Los consumidores vulnerables severos tendrán una mayor protección y se beneficiarán de un descuento del 40% de su factura. Las familias numerosas o los hogares donde todos sus miembros que tengan ingresos sean pensionistas de la Seguridad Social por jubilación o incapacidad permanente, percibiendo la cuantía mínima, serán considerados vulnerables severos si su renta es inferior a 2 veces el IPREM o 1 vez el IPREM respectivamente.

También se crea también la categoría de consumidores en riesgo de exclusión social, que serán aquellos consumidores vulnerables severos que, por sus especiales circunstancias, estén siendo atendidos por los servicios sociales de ayuntamientos o comunidades autónomas. Estos consumidores serán considerados esenciales y no se les podrá suspender el suministro. Esto será financiado por medio de la financiación adicional que liberará el sistema eléctrico (10%) y que complementará la aportación de los servicios sociales (50%) y del propio bono social (40%).

Lucha contra la pobreza energética

Por su parte, Navia destacó que el bono social cubrirá un conjunto de consumidores ligeramente superior al que disfruta actualmente de la ayuda, al tiempo que lo hará de forma más eficiente, al vincular su percepción a criterios de renta. Para elaborar la nueva regulación, el Gobierno parte de las cifras de Eurostat según las cuales cerca del 10% de la población se encuentra en riesgo de pobreza. El objetivo del bono social será proteger mediante descuentos en el recibo de la luz a 2,5 millones de hogares, lo que equivale a unos 7 millones de personas. Navia también destacó mejoras en los procesos de notificación y avisos de impago.

Facua asegura que el recibo de la luz aumentó un 22% en febrero con respecto al año pasado

Europa Press.- El recibo de la luz aumentó un 22% en febrero con respecto al mismo mes del año pasado, según datos de la asociación Facua-Consumidores en Acción. En concreto, con las tarifas de febrero, el usuario medio con la tarifa PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor) pagará 76,10 euros, frente a los 62,39 euros del mismo mes en 2016, indicó la asociación.

En enero, la factura batió «todos los récords», según Facua, al situarse en 87,81 euros, un 29,4% por encima de los 67,84 euros del mismo mes del año pasado, aunque un 15,4% superior a la de este mes de febrero. El precio medio del kilovatio hora (kWh) este febrero fue de 15,55 céntimos (12,23 céntimos más impuestos), después de que en enero alcanzase los 18,75 céntimos (14,74 céntimos más impuestos). En febrero de 2016 el kWh se situó en 11,69 céntimos (9,19 céntimos más impuestos).

Facua reclama la intervención del sector para que sea el Ejecutivo el que fije periódicamente una «tarifa asequible, dado que el sistema de fijación de precios existente en el mercado de la generación español fomenta la especulación y los abusos». Además, la asociación demanda la bajada del IVA que se aplica a la electricidad, del 21%, «impropio de un servicio esencial», y pide que se baje al tipo mínimo permitido por la normativa europea, «legislación que también debe ser modificada para facilitar una bajada mayor».

La factura de la luz se encareció un 19,17% en febrero

Europa Press.- Un consumidor doméstico medio pagó 64,15 euros en su factura de la luz de febrero, por lo que esta factura se incrementó en un 19,17% respecto a los 53,83 euros de febrero de 2016, lo que supuso una subida en el recibo eléctrico de 10,32 euros, según los datos obtenidos para la tarifa regulada Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) con el simulador de la factura de la luz que ofrece en su web la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Para el cálculo de estos datos se ha utilizado el consumidor medio que suele emplear el Ministerio de Energía: un consumo de 3.900 kilovatios hora (kWh) anuales y una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW). De los 64,15 euros abonados en los 28 días de enero del 2017, 13,89 euros se corresponden al término fijo de potencia contratada. Del resto de la factura de enero, 36,55 euros obedecen al consumo, 2,58 euros al impuesto eléctrico y 11,13 euros al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).

Sube respecto al año pasado

El recibo eléctrico refleja así el incremento que experimentó el mercado mayorista (pool) este mes, con unos precios que han elevado la tarifa regulada de electricidad, con 12 millones de consumidores. Para el resto de consumidores de electricidad, 13 millones que están en el mercado libre, esta evolución del mercado mayorista no tiene un reflejo tan directo en sus recibos, ya que tienen contratos con un precio fijado para un periodo, habitualmente, de un año.

Sin embargo, la factura de la luz de febrero bajó un 12,93% respecto al mes anterior, enero, dado que el coste diario de la electricidad fue de 2,29 euros en febrero de 2017 respecto a los 2,63 euros de enero de 2017. Se trata del primer descenso en la factura de la luz entre meses consecutivos desde mayo de 2016, después de haber encadenado nueve meses consecutivos de alzas. En esta comparación se utilizan los costes diarios para evitar el efecto de la diferente duración diaria de los distintos meses.

Gas Natural Fenosa inyecta 10 millones de euros a su comercializadora regulada de luz para compensar sus pérdidas en 2016

Europa Press.- Gas Natural Fenosa ha inyectado 10 millones de euros en 2016 a su comercializadora de referencia encargada del suministro regulado de electricidad al consumidor doméstico, conocida como Gas Natural SUR SDG, con el objeto de compensar las pérdidas registradas por la filial. Esta aportación aparece recogida en la auditoría de la compañía correspondiente a 2016, junto a otra dotación por importe de 30 millones de euros para reajustar el balance de la filial Gas Natural Exploración, que también registró pérdidas.

Las pérdidas en la comercializadora del Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) de electricidad se suman a las registradas en ejercicios anteriores. En 2015, las sociedades con las que Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa ofrecen este servicio regulado declararon números rojos por importe de 28,9 millones de euros. Este desfase fue precisamente objeto de diversos recursos de las empresas ante el Tribunal Supremo, que les dio la razón y obligó al Gobierno a diseñar una nueva metodología con el objeto de reconocer un margen de comercialización de electricidad suficiente.

El Gobierno revisó al alza este margen mediante una nueva metodología en la que no solo se recoge un importe fijo en función de los kilovatios (kW) contratados, sino también otro variable asociado al consumo realizado. Esta revisión, que implica una subida del recibo doméstico cercana al 0,004%, es más limitada que la propuesta por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que abogaba por elevar el margen de las comercializadoras de referencia un 31%, hasta 5,24 euros por kW. Tanto Gas Natural como Iberdrola, EDP o Viesgo han recurrido ante el Supremo la nueva metodología al considerar que sigue sin cubrir suficientemente los costes de comercialización.

La CNMC estima que la tarifa regulada PVPC fue un 5% más barata en 2016 que el mercado libre

Europa Press.- La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) estima que el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) ha sido la opción más barata en 2016 para los consumidores domésticos de electricidad, siendo alrededor de un 5% más económica que cualquiera de las ofertas disponibles en el mercado libre, según indicó el regulador en una entrada en su blog.

No obstante, la CNMC señala que este dato no quiere decir que durante enero haya habido ofertas en el mercado libre más baratas que las del mercado regulado. Para un consumidor doméstico sin discriminación horaria, con una potencia contratada de 3,45 kilovatios (kW) y con un consumo medio de electricidad de 2.500 kilovatios hora (kWh) acogido al PVPC su factura de la luz en enero habría sido de 61 euros, frente a los 56 euros de diciembre, un 9% más.

En cualquier caso, la facturación anual de un consumidor acogido al PVPC para el último año, en el periodo de febrero de 2016 a enero de 2017, ha sido un 6% más baja que la del año anterior, indica la CNMC. Asimismo, Competencia señala que la comparación de la facturación de un consumidor acogido al PVPC, que a cierre de año ascendían a 11,99 millones, con la que tendría si hubiera contratado con una comercializadora de mercado libre varía cada año dependiendo del mercado mayorista y de la oferta elegida.

La factura de la luz se encarece un 28,56% en enero

Redacción.- Un consumidor doméstico medio pagará 81,61 euros en su factura de la luz de enero, por lo que esta factura se incrementó en un 28,56% respecto a los 63,48 euros de enero 2016, lo que supuso una subida en el recibo eléctrico de 18,13 euros, según los datos obtenidos para la tarifa regulada Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) con el simulador de la factura de la luz que ofrece en su web la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Para el cálculo de estos datos se ha utilizado el consumidor medio que suele emplear el Ministerio de Energía, el de un consumo de 3.900 kilovatios hora (kWh) anuales y una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW), que el Ministerio asegura que se corresponde con el de una familia de un matrimonio con dos hijos. De los 81,61 euros abonados en los 31 días de enero del 2017, 15,38 euros se corresponden al término fijo de potencia contratada. Del resto de la factura de enero, 48,79 euros obedecen al consumo, 3,28 euros al impuesto eléctrico y 14,16 euros al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).

Asimismo, la subida de la factura de la luz de enero respecto al mes anterior, diciembre, fue del 9,13%, dado que el coste diario de la electricidad fue de 2,63 euros en enero de 2017 respecto a los 2,41 euros de diciembre de 2016. En esta comparación se utilizan los costes diarios para evitar el efecto de la diferente duración diaria de los distintos meses (28,29,30 o 31) a efectos de garantizar la homogeneidad estadística

El recibo eléctrico refleja así el incremento que experimentó el mercado mayorista (pool) este mes, con unos precios que han elevado la tarifa regulada de electricidad, con 12 millones de consumidores. Para el resto de consumidores de electricidad, 13 millones que están en el mercado libre, esta evolución del mercado mayorista no tiene un reflejo tan directo en sus recibos, ya que tienen contratos con un precio fijado para un periodo, habitualmente, de un año.

Desde el Gobierno, el ministro de Energía, Álvaro Nadal, rechazó hacer cambios en el mercado eléctrico así como realizar una nueva revisión de los costes tras la reforma del sector eléctrico llevada a cabo en la anterior legislatura. Nadal explicó también las causas que han llevado a vivir los picos de este mes: subidas del gas, el petróleo y el carbón en los mercados internacionales, la situación de Francia, con nucleares paradas y fuerte consumo, o las dificultades de acceso al gas licuado en Argelia en mitad de una ola de frío, con poca producción eólica e hidroeléctrica en España.

¿Qué se paga con la tarifa eléctrica regulada?

EFE.– La tarifa eléctrica regulada, a la que están acogidos 12 millones de consumidores, sigue siendo una gran desconocida a pesar de la polémica que ha suscitado durante las últimas semanas la brusca subida de la electricidad en el mercado mayorista, que parece haber empezado a remitir. De hecho, en numerosas ocasiones se ha confundido la evolución del precio en el mercado mayorista con el comportamiento de la tarifa regulada, denominada Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).

Si dejamos al margen los contratos de suministro firmados por los consumidores que están en el mercado libre, unos 13 millones, el primer dato a destacar es que el coste de producción representa tan sólo el 35% de la tarifa regulada. El 65% restante corresponde a impuestos (IVA e Impuesto de Electricidad), al margen de comercialización, al alquiler del contador y, sobre todo, a los llamados peajes de acceso, que suponen en torno al 40% del recibo de la luz y que fija el Gobierno.

Aunque los peajes están congelados e incluso bajaron en 2016, no faltan los expertos que cuestionan algunos de los conceptos que engloban. El capítulo de costes regulados incluye la retribución de dos actividades necesarias para hacer llegar la electricidad a hogares y empresas: el transporte, que permite llevar la energía desde las centrales hasta las subestaciones, de la que se ocupa Red Eléctrica de España; y la distribución, que la reparte entre los consumidores finales.

Pero también son costes regulados las primas a las energías renovables; la compensación a los sistemas extrapeninsulares (Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla) por sus mayores costes de producción; la recuperación del déficit tarifario acumulado en ejercicios anteriores; los pagos por capacidad, para que siempre haya centrales de reserva, y la financiación de la interrumpibilidad, el descuento aplicado a las empresas a las que se puede cortar la luz en caso de necesidad. Si se eliminaran algunos de estos conceptos, la tarifa regulada bajaría sensiblemente, pero habría que determinar de qué forma se pagarían, por ejemplo, las primas a las renovables.

Mención especial merece la recuperación del déficit tarifario, una bola de deuda de más de 20.000 millones de euros que empezó a gestarse en los gobiernos de José María Aznar por la decisión de no subir la tarifa más del 2% durante varios años y que se disparó con la política de ayudas a las renovables en tiempos de José Luis Rodríguez Zapatero. Esa «pesada mochila» se sigue pagando a través de la tarifa, aunque la reforma energética acometida por el Gobierno del PP ha conseguido, aparentemente, eliminar el déficit.

Sin embargo, lo que disparó la polémica en las últimas semanas ha sido la subida del precio de la electricidad en el mercado mayorista. Hay razones que pueden explicar la subida: la ola de frío, que ha disparado la demanda; la ausencia de agua y viento, que ha obligado a utilizar centrales más caras; el encarecimiento del petróleo y el gas natural, y el parón de varias nucleares francesas. Pero tanto el Ministerio de Energía como la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) analizan si, además, hubo algún comportamiento anticompetitivo por parte de los agentes del sector.

El Ministerio de Energía ha tomado medidas para aumentar la competencia en el mercado gasista y conseguir precios más competitivos. En la situación actual, los precios del mercado eléctrico mayorista los marcan las centrales de ciclo combinado, que utilizan el gas como combustible. Energía ha incorporado la figura del «creador de mercado», que ya existe en otros países europeos, para conseguir más liquidez en Mibgas, el mercado gasista organizado. Además, obligará a los operadores dominantes del sector gasista a ofrecer un volumen determinado de gas en el mercado. Ahora se espera que los precios de la electricidad se moderen a medida que suban las temperaturas, vuelva a soplar el viento y, si hay suerte, llueva.

La OCU ve posible ahorrar entre 60 y 300 euros al año en el recibo de la luz

Europa Press.- La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) considera que es posible ahorrar entre 60 y 300 euros anuales en el recibo eléctrico y aconseja la discriminación horaria como una de las fórmulas más eficaces para rebajar la factura. Cambiar a la modalidad de discriminación horaria tiene un coste de 11 euros y el usuario ahorraría como mínimo 70 euros al año sin modificar sus hábitos de consumo.

La organización considera que, de cara a elegir la mejor tarifa, es necesario que el consumidor identifique además si dispone del Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC). Para descubrirlo, puede identificar el nombre de las comercializadoras que prestan este servicio, entre las que figuran Endesa Energía XXI, Iberdrola Comercialización de Último Recurso, Gas Natural SUR, EDP Comercialización de Último Recurso o Viesgo Comercializadora de Referencia.

OCU comparó el ahorro que ha supuesto tener contratada la tarifa PVPC frente a las mejores ofertas del mercado y concluyó que, durante 2014 y 2015, fue posible encontrar en el mercado libre ofertas que mejoraron la tarifa PVPC, si bien desde 2015 hasta ahora el PVPC permitió ahorros adicionales sobre las mejores ofertas en el mercado libre. Sin embargo, la volatilidad del PVPC, con subidas de precios como las actuales, hace que sea un buen momento para mirar otras alternativas que ofrezcan una factura más estable, señala la OCU.

Por este motivo, la organización aconseja optar por tarifas cuyas condiciones no sean revisables al menos durante un año y descartar las que incluyan servicios adicionales no deseados, como las revisiones de la instalación eléctrica o seguros de pago. También insiste en la importancia de optar siempre por discriminación horaria y recomienda al usuario revisar si cumple los requisitos del bono social y solicitarlo si puede. La OCU también dice que, por normal general, las ofertas ligadas a facturación online suelen ser las más económicas.

La OCU afirma que la forma más inmediata y sencilla de ahorrar, se tenga una tarifa regulada o se esté en el mercado libre, es optar por la discriminación horaria. Conforme a la OCU, en media los hogares concentran un 50% de su consumo en el horario valle (aquellas horas del día donde el consumo es más económico) y bastaría con tener un consumo de un 30% en ese horario valle para empezar a ahorrar.

El precio de la electricidad repunta este martes un 4,8% para volver a asomarse a sus niveles máximos

Europa Press / EFE.- El precio de la electricidad se situará este martes en una media de 87,9 euros por megavatio hora (MWh), lo que supone un 4,8% más que los 83,85 euros fijados para este lunes, asomándose así de nuevo a los niveles máximos marcados durante la ola de frío, según el operador del mercado ibérico, OMIE. Estos 87,9 euros por MWh suponen la segunda referencia más elevada en lo que va de año, sólo superada por los 88 euros por MWh del pasado viernes.

Durante este fin de semana los precios bajaron hasta los 79 euros para el sábado y los 72 euros para el domingo, aunque se situaban en los niveles más elevados para un fin de semana desde el mes de diciembre de 2013, cuando las subidas en el mercado mayorista llevaron al Gobierno a suspender el anterior sistema de subasta eléctrica (Cesur) y sustituirlo por el actual, en el que el precio regulado deja de consistir en una referencia trimestral y queda vinculado al precio de cada hora en el mercado.

Volatilidad en la tarifa regulada

La demanda prevista para este martes asciende a 632 gigavatios hora (GWh), prácticamente en línea de los 633 GWh previstos para el lunes, según datos de OMIE. La hora más cara para este martes será las nueve de la noche, cuando el mercado mayorista pool, alcanzará un precio de 99,1 euros por MWh, mientras que la más barata del día será las cinco de la mañana, con el precio situado en 69,09 euros por MWh. La volatilidad de los precios en el mercado mayorista se refleja más directamente en los consumidores acogidos a la tarifa regulada o PVPC, unos 12 millones, mientras que los que están en el mercado libre, otros 13 millones, tienen precios fijados con sus compañías eléctricas.

Aparte de la mayor demanda, sobre el precio final inciden otros aspectos como el bajo nivel de recurso hidráulico y el elevado precio del carbón y del gas natural, así como la mayor exportación a Francia por la indisponibilidad de algunas de sus centrales nucleares. El pool funciona de forma marginalista, de modo que las tecnologías entran por orden de coste y la última de ellas en participar, la más cara, marca el precio definitivo.

Los precios horarios se aplican a los consumidores domésticos que dispongan de contadores inteligentes y tarificación por horas, entre los que figuran los usuarios que tienen contratado el PVPC y disponen de estos aparatos. El precio mayorista de la electricidad tiene un peso cercano al 35% sobre el recibo final, mientras que alrededor del 40% corresponde a los peajes y cerca del 25% restante, al IVA y al Impuesto de Electricidad. El Gobierno ha congelado para 2017 los peajes y cargos eléctricos con los que los consumidores sufragan los costes regulados. Por otro lado, los precios diarios del mercado mayorista se fijan con un día de antelación, alrededor del mediodía.