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La Comisión Europea insta a los países vecinos a coordinarse para dejar de aplicar el cambio de hora en 2019

EFE.- La Comisión Europea propuso a los países de la Unión Europea coordinarse entre los que son vecinos para poner fin al cambio de hora bianual para que pueda aplicarse ya el año próximo.

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, confirmó durante su discurso sobre el Estado de la Unión ante el pleno de la Eurocámara una propuesta para poner fin a los cambios de hora, tras la encuesta pública que recabó un número récord de respuestas (4,6 millones) y que reveló que mayoritariamente (un 84%) los ciudadanos europeos quieren terminar con esa práctica.

Una mayoría (el 56%) se decantó por mantener todo el año el horario de verano, frente al 36% que prefirió el de invierno y un 8% que dijo no tener una opinión sobre el asunto.

En su propuesta legislativa, la Comisión ofrece a los Estados miembros la libertad de decidir si se regirán de manera permanente por la hora de verano o la de invierno, pero insta a que lo acuerden «de manera coordinada entre países vecinos».

Para evitar fragmentación en el funcionamiento del mercado interior, todos ellos deberán obligatoriamente suprimir el cambio de hora.

La propuesta de la Comisión elimina el cambio de hora bianual en el conjunto de la Unión Europea a partir del año que viene, fija un calendario «breve y claro» para que los cambios entren en vigor, y anima a «realizar consultas en los ámbitos nacional y europeo» para lograr un «enfoque coordinado» entre Estados miembros.

Así, según la Comisión Europea, el último cambio obligatorio a la hora de verano tendría lugar el domingo 31 de marzo de 2019, momento a partir del cual los Estados miembros que quisieran volver a la hora de invierno podrían efectuar un último cambio de hora el domingo 27 de octubre de 2019.

A partir de esa fecha no se podrían realizar más cambios, de acuerdo a la propuesta de la Comisión, que recordó que ese calendario está supeditado a la adopción de la propuesta de la Comisión a más tardar en marzo de 2019 por parte del Parlamento Europeo y el Consejo (los países).

Diferentes estudios en 2018 indicaron que el ahorro de energía por esta medida es mínimo mientras que aumentaban las quejas de los ciudadanos por efectos negativos para la salud.

Por todo ello, la Comisión Europea concluyó que «no tiene sentido» seguir regulando el cambio de hora bianual y que son los Estados miembros quienes deben tener la libertad de elegir si prefieren mantener la hora de verano o la de invierno y gestionarlo a nivel nacional.

En su turno de palabra, la eurodiputada española del BNG, Ana Miranda, pidió que Galicia y Portugal cambien de uso horario, al entender «el desfase entre la hora oficial y la hora solar es de dos horas y media en Galicia» y que esto tiene consecuencias perniciosas en la salud y el trabajo.

«Es un horario propuesto por el franquismo para adaptar la hora a la Alemania nazi», indicó Miranda.

El Gobierno crea una comisión de expertos para estudiar si es relevante el ahorro energético que aporta el cambio horario

EFE.- El Consejo de Ministros ha creado una «comisión de personas expertas para el estudio de la reforma de la hora oficial», tras el anuncio hecho en agosto por la Comisión Europea de proponer el fin del movimiento estacional horario, según indicó la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá.

La comisión se encargará de la elaboración de un informe de evaluación de las disposiciones reguladoras del cambio horario, así como sobre la conveniencia de mantener en nuestro país la hora de Europa central, ha informado el Gobierno.

El informe se remitirá a la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad.

La comisión estará formada por un máximo de 14 personas, y tiene como objetivo la presentación de propuestas orientadas la protección y mejora de la salud, sobre todo de las personas más vulnerables, potenciar la sostenibilidad social, ambiental y económica, y favorecer el principio de igualdad entre hombres y mujeres.

Asimismo, la comisión evaluará los costes y beneficios en relación a diferentes actividades.

En relación con los costes hará una evaluación sobre la eficiencia energética y económica de las distintas actividades productivas.

En cuanto beneficios, se valorarán especialmente los posibles impactos positivos sobre la salud de las personas y sobre la igualdad entre mujeres y hombres.

Esta modificación se hará en el marco del proceso de modificación de la Directiva 2000/84/CE solicitada por el Parlamento Europeo a la Comisión.

Los Estados miembros están distribuidos en tres husos horarios diferentes, que comprenden la hora de Europa occidental (UTC), hora de Europa central (UTC +1) y hora de Europa oriental (UTC+2).

Aunque geográficamente España se halla en el área correspondiente a la hora de Europa occidental, nuestro país adoptó el huso horario correspondiente a Europa central mediante una Orden de Presidencia del Gobierno de 7 de marzo de 1940.

Por otro lado, el Pleno del Congreso de los Diputados acordó en su sesión de 13 de septiembre de 2012 la creación, en la Comisión de Igualdad, de una Subcomisión para el estudio de la racionalización de horarios, la conciliación de la vida personal, familiar y laboral y la corresponsabilidad.

La Unión Europea debate si el ahorro energético es suficiente para justificar el cambio de hora en verano e invierno

Europa Press.- La consulta sobre el cambio horario en verano e invierno organizada por la Comisión Europea ha recibido rápidamente más de medio millón de respuestas, un «gran interés ciudadano» que muestra la necesidad de abordar este asunto, según el director de la Representación de la Comisión Europea en Barcelona, Ferran Tarradellas.

La sede barcelonesa ha acogido un debate de expertos sobre el posible cambio, en el que destacaron el ahorro energético y los efectos sobre la salud como los principales argumentos a favor y en contra, según la institución, que añadió que puede votarse hasta el 16 de agosto. El impulsor del pacto por la Reforma Horaria, Fabian Mohedano, defendió que, desde el punto de vista de racionalización de horarios de su proyecto, conviene mantener «el mismo horario» durante todo el año porque el ahorro energético ha dejado de ser significativo.

El presidente del Clúster de Eficiencia Energética de Catalunya, Xavier Farriols, ha discrepado y ha dado importancia al ahorro energético, y ha relatado que aunque hacen falta más estudios sobre cuánto representa, «incluso si el ahorro se limita a un 1%, es muy significativo en términos absolutos«. Por su parte, la cronobióloga y profesora titular de la Universidad de Barcelona (UB), Trinitat Cambras, ha afirmado que desde el punto de vida de la salud «es preferible mantener siempre el mismo horario», y señaló el de invierno como el más recomendable.

El cambio de hora ahorra 300 millones de euros según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía

Europa Press.- El cambio de hora en la madrugada del pasado domingo, cuando a las 03.00 horas se retrasaron los relojes hasta las 02.00, dio por finalizado el horario de verano. El cambio de hora de verano a invierno se produce el último domingo de octubre en toda Europa, de acuerdo a la Directiva Comunitaria del Cambio de Hora, que es de obligado cumplimiento con el objetivo de lograr un ahorro energético.

Según estimaciones del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el potencial de ahorro en iluminación podría alcanzar en torno a 300 millones de euros, el equivalente al 5% del total. De esa cantidad, 90 millones corresponde al potencial de los hogares, lo que supone un ahorro de 6 euros por hogar y 210 millones restantes se ahorrarían en los edificios del terciario y en la industria.

El cambio de hora empezó a generalizarse a partir de 1974, a partir de la primera crisis del petróleo, cuando algunos países decidieron adelantar el reloj para aprovechar mejor la luz del sol y consumir así menos electricidad en iluminación. Según el IDAE, el cambio de hora busca el buen funcionamiento de «algunos sectores», no solo el de los transportes y las comunicaciones, sino también otros ramos de la industria, por lo que requiere una programación estable a largo plazo.

Sin embargo, el IDAE recuerda que para alcanzar el potencial de ahorro total se debe tener un comportamiento responsable y prescindir de la iluminación artificial cuando no sea necesaria, así como la utilización de tecnologías de ahorro en iluminación por aprovechamiento de la luz natural en edificios e industrias. Por ejemplo, recomienda tecnologías como fotocélulas o sensores de luz que apagan o regulan la iluminación artificial en función de la luz natural aportada a la zona, a través de ventanas o lucernarios. En todo caso, aconseja a los ciudadanos que contribuyan al ahorro de energía durante todo el año haciendo un uso inteligente de los equipos consumidores (iluminación, calefacción, electrodomésticos).

El ahorro de 300 millones de euros en iluminación es el argumento más usado para justificar el cambio de hora

EFE / Servimedia.- El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) cifra en unos 300 millones de euros el ahorro energético en iluminación conseguido con el adelantamiento de los relojes en una hora para cumplir la directiva de cambio horario, alrededor del 5% del consumo eléctrico aprovechando la luz solar, de obligado cumplimiento para los miembros de la Unión Europea y que fue incorporada al ordenamiento jurídico español en 2002.

De esa cantidad, 90 millones corresponderían al potencial de los hogares españoles, lo que supone un ahorro de 6 euros por hogar, mientras que los 210 millones de euros restantes se ahorrarían en los edificios del sector servicios y en la industria. El cambio de hora comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974, cuando se produjo la primera crisis del petróleo y algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz y consumir así menos electricidad en iluminación.

En 1981, se comenzó a aplicar como una directiva europea, que ha sido renovada sucesivamente cada cuatro años. Desde la aprobación de la Novena Directiva, por el Parlamento Europeo y Consejo de la Unión, en enero de 2001, este cambio se aplica con carácter indefinido. Dicha directiva establece con carácter permanente las fechas de inicio del periodo de la Hora de Verano (en el que, como ahora, se adelanta el reloj una hora) y su finalización (cuando se retrasa el reloj una hora), produciéndose el último domingo del mes de marzo y el último domingo del mes de octubre, respectivamente.

Esta medida también tiene detractores

Sin embargo, también hay detractores de esta medida que esgrimen razones de conciliación, así como de índole sociológica. El presidente de la Asociación para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE) José Luis Casero, ha asegurado que los estudios elaborados a finales del siglo XX y sobre los cuales se basó la normativa «reflejaban una realidad distinta a la actual y además no cuantificaban todas las variables, como el gasto en aire acondicionado» por lo que «el impacto real en el consumo energético es pequeño«.

En el mismo sentido, el astrónomo del Real Observatorio de Madrid, Pere Planesas, asegura que los informes que avalaron el cambio de hora arrojaban «unas cifras de ahorro insignificantes, en torno a los 6 euros por persona«. Además, en el caso español, el debate de los últimos años se refiere a la posibilidad de recuperar el horario que le corresponde de manera natural: el mismo que tienen Portugal o Gran Bretaña, en lugar del centroeuropeo, adoptado en marzo de 1940.

El horario no se cambió pese al resultado de la segunda guerra mundial porque, como recuerda Planesas, «estamos ante una cuestión de índole política que obedece a la necesidad de armonizar nuestros horarios respecto a los países con los que tenemos mayor actividad comercial…, que son los de la Unión Europea«. A ello hay que sumar que «no existe en la opinión pública española un clamor por regresar al horario que nos corresponde» porque la sociedad «parece disfrutar de disponer de esa hora extra de luz solar destinada al ocio y el consumo» y en la que «el ahorro energético pasa a un segundo plano».

Industria advierte a Baleares de que no puede seguir en el horario de verano porque la normativa es europea

Europa Press.- El Ministerio de Industria, Energía y Turismo aseguró que Baleares «no puede modificar o mantener de forma unilateral el horario» y quedarse en el horario de verano (GMT+2) porque el cambio de hora está regulado a nivel europeo en una Directiva de la Unión Europea que afecta a todos los miembros.

Todos los grupos políticos del Parlamento de Baleares aprobaron una declaración institucional para permanecer en el horario de verano porque la comunidad autónoma es la «más afectada» por el cambio de hora, al ser el primer lugar de España donde amanece y anochece. Según fuentes de Industria, aún se desconocen las consecuencias que tendría la propuesta insular de seguir con el horario de verano a partir del próximo 30 de octubre, cuando a las 3.00 horas volverán a ser las 2.00 horas, de modo que comenzará el horario de invierno.

En la misma línea, las Cortes de la Comunidad Valenciana acordaron instar al Gobierno central a que abra el debate social sobre el mantenimiento del horario de verano en el país ante los beneficios sociales y económicos que comportaría, sumándose así a la propuesta lanzada por el parlamento de Baleares. Por el contrario, el Ejecutivo catalán resaltó el ahorro económico que supone el cambio horario.

En todo caso, Industria recuerda que este cambio horario, motivado para favorecer el ahorro energético, está regulado en toda Europa, por lo que difícilmente ninguna autonomía podría ir en contra. Se trata de la Novena Directiva del Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión, que desde 2001 se aplica indefinidamente para favorecer la planificación. La Directiva se incorporó a la normativa española mediante el Real Decreto 236/2002. Así, el cambio de hora se produce el último domingo de marzo y el último de octubre.

El cambio de hora y la vuelta al horario de invierno comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974, cuando se produjo la primera crisis del petróleo y algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz solar y consumir así menos electricidad en iluminación. Se aplica como directiva desde 1981 y ha sido renovada sucesivamente cada cuatro años.

300 millones de ahorro energético

El horario de verano, que se ha aplicado entre marzo y octubre y que concluirá este fin de semana, ha permitido ahorrar energía por valor de 300 millones de euros, o lo equivalente a un 5% del consumo, según cálculos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Industria indicó que este ahorro procede de iluminación y que, de la cifra total, 90 millones corresponden a los hogares españoles, lo que supone un ahorro de 6 euros por hogar. Los otros 210 millones proceden de los edificios del sector terciario y de la industria.

En todo caso, Industria advierte de que estas cifras son potenciales, ya que para alcanzarlas es necesario llevar a cabo un comportamiento racional en el hogar a la hora de prescindir de la iluminación artificial cuando no es necesaria, así como usar tecnologías de ahorro en iluminación por aprovechamiento de la luz natural, en edificios del terciario y en industrias.

El Código Técnico de la Edificación hace ya obligatoria en edificios de nueva construcción la instalación de fotocélulas o sensores de luz que apagan o regulan la iluminación en función de las necesidades. Además, Industria recuerda que el Plan de Acción de la Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética, aprobado por el Gobierno, posibilita ayudas para reformar la iluminación en los edificios del sector terciario.

La Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE) reivindica desde hace años que España regrese al meridiano de Greenwich, que es el que, a su juicio, le corresponde. Según ARHOE, el desfase horario comenzó desde 1942, cuando se adaptó el horario español al de Berlín (Hora Europea Central) en alineación con el régimen nazi y nunca se recuperó el horario en correspondencia con la hora solar. La asociación considera que España tiene que adoptar la hora oficial del Reino Unido, Portugal, Marruecos y Canarias (Hora Europea Occidental), que es la que le corresponde geográficamente y abandonar la Hora Europea Central, que corresponde a países más al este.

A raíz de esta polémica, el presidente de ARHOE, José Luis Casero, reclamó a Baleares «no territorializar» el cambio horario tras la decisión del Parlamento balear. «No deja de ser un gesto cara a la galería porque lo que hay es una Directiva Europea que se tiene cumplir y que afecta a todos sus Estados miembro, por lo que el Gobierno no tiene potestad», indicó Casero, al tiempo que reiteró que la solución pasa por regresar al meridiano de Greenwich.

El cambio al horario de verano de este domingo supone ahorrar un 5% en iluminación

Europa Press.- La madrugada del próximo domingo, 27 de marzo, comenzará el horario de verano ya que a las 02.00 horas se adelantarán una hora los relojes hasta las 03.00 horas. El cambio obedece a una Directiva Comunitaria dirigida a favorecer el ahorro energético. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), el potencial de ahorro en iluminación que genera esta medida puede suponer un 5%, es decir, 300 millones de euros de acuerdo con los precios actualmente vigentes.

El cambio de hora comenzó a generalizarse de forma desigual a partir de 1974 a raíz de la primera crisis del petróleo. Entonces algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz natural del sol y consumir así menos electricidad en iluminación. La directiva se aplica desde 1981 y cada 4 años se ha renovado de forma sucesiva. Esta normativa se aplica con carácter indefinido desde la aprobación de la Novena Directiva por el Parlamento Europeo y Consejo de la Unión, en enero de 2001. La Directiva está incorporada al ordenamiento jurídico español por el Real Decreto 236/2002, de 1 de marzo.

Su carácter indefinido de la aplicación del cambio de hora se adoptó por entenderse que el «buen funcionamiento de algunos sectores, no sólo el de los transportes y las comunicaciones, sino también otros ramos de la industria, requiere una programación estable a largo plazo». El horario de verano comienza cuando se adelanta una hora el reloj, en la madrugada del último domingo de marzo y finaliza cuando se retrasa una hora el reloj a la misma hora del último domingo de octubre. Con ello, todos los ciudadanos e instituciones, públicas y privadas de la Unión conocen anticipadamente las fechas del cambio horario anual y pueden planificar su actividad sin necesidad de esperar ninguna norma futura.

Según el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, la Directiva está avalada por las conclusiones de un estudio sobre su alcance y efectos realizado por encargo de la Comisión Europea y  presentado al Parlamento en 1999. El estudio concluyó que el cambio de hora tiene impactos positivos, no sólo sobre el ahorro sino sobre otros sectores como el transporte, las comunicaciones, la seguridad vial, las condiciones de trabajo y los modos de vida, la salud, el turismo o el ocio.

De los 300 millones de ahorro, 90 millones corresponden al potencial de los hogares, lo que supone un ahorro de 6 euros por hogar, mientras que los otros 210 millones de euros restantes se ahorrarían en los edificios del sector terciario y en la industria. Sin embargo, el IDAE subraya que para alcanzar este potencial de ahorro, no obstante se tendrá que adoptar un comportamiento «responsable» en el hogar a la hora de prescindir de la iluminación artificial cuando no es necesaria, así como la utilización de  tecnologías de ahorro en iluminación por aprovechamiento de la luz natural en edificios del terciario y en industrias.

Estas tecnologías ampliamente experimentadas consisten en fotocélulas o sensores de luz que apagan o regulan la iluminación artificial en función de la luz natural aportada a la zona, a través de ventanas o lucernarios. Según recuerda, el Código Técnico de la Edificación hace ya obligatoria la instalación de estos sistemas en los edificios de nueva construcción. Además, los ciudadanos también pueden ahorrar durante todo el año haciendo un uso inteligente de la iluminación en nuestros hogares. Concretamente, seguir determinadas pautas o hábitos puede ahorrar 100 euros al año y evitar emisiones contaminantes a la atmósfera.

Entre los consejos para ahorrar energía con la iluminación, destaca la importancia de aprovechar la luz natural, ya que la luz del sol es «gratis»; acordarse de apagara las luces al salir de la habitación. También aconseja la utilización de bajo consumo o fluorescentes compactas y son ideales para puntos de luz con uso diario de más de tres horas y permiten un ahorro del 80%. Otra alternativa eficiente son las lámparas halógenas LED, que pueden permitir ahorrar hasta un 80% en el consumo de energía de ese punto de luz. También destacan la iluminación localizada, que contribuye a crear ambientes más confortables y acogedores.